El pacto del chinchulín y el nacimiento de ANCAP
En vísperas de la inauguración de la planta desulfurizadora de ANCAP, en Suena Tremendo miramos al pasado para rememorar cómo fue el nacimiento de la empresa estatal de combustibles. La profesora de Historia Silvana Harriet, quien es co-autora del libro "75 años de ANCAP", explicó que la empresa nace en 1931, durante el gobierno del colorado Gabriel Terra. En esos tiempos, Uruguay empezaba a sentir los efectos de la crisis del año 29 con la pérdida de su capacidad importadora de varios productos, entre ellos, el combustible. Fue así como el Poder Ejecutivo y los batllistas desde el Consejo Nacional de Administración reafirmaron la idea de que el Estado debía ocuparse de la importación y refinación del petróleo, que hasta el momento estaba en poder de compañías extrajeras. "Esta idea es apoyada por los nacionalistas independientes, con quien los batllistas habían hecho un acuerdo parlamentario relativo a asegurarse la aprobación de algunas leyes de intervención del Estado y garantizaban en este grupo la participación en los entes autónomos", detalló Harriet. La historiadora puntualizó que Luis Alberto de Herrera le llamaría a este acuerdo entre batllistas y nacionalistas independientes "el pacto del chinchulín".