En Perspectiva y sus oyentes

Cuentos ganadores de la octava etapa de 2013, del concurso de cuentos breves de La Tertulia de los Viernes.

Este mes, la consigna del concurso era "el tiempo".


Autores nominados (por sus seudónimos):  

ALIMAI
DAEDALUS
DETEVE
EL DEL PRADO
EL LEON
EL PEQUE
ELZORRO
FRIDA
JUBILEO
MARIPOSA
VASKO

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Cuentos preferidos por el jurado.
 
Elegido por Juan Grompone  
Sin título

Â"Al  entrar los envolvió el ambiente cálido del lugar.
Dejaron los abrigos y el gran sobre blanco de la tomografía sobre una silla.
Pidieron dos cafés.
Ella le tomó la mano y  lo miró a los ojos. El bajó la mirada y como hablando consigo mismo le dijo muy quedo: no va a ser muy largoÂ".


Â"VaskoÂ"
 Mario Iturburu Gutiérrez   706911-4

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Elegido por Matilde Rodríguez Larreta

Título: Â"Temporada altaÂ"

    El hombre hace horas que mira el horizonte desde la portera.  Como si de ovejas se tratara, cuenta las nubes flacas y aprieta los dientes. Ve los surcos resquebrajados que acunan las semillas recocidas por el sol. No falta mucho para que se queden vacíos los platos en su mesa.
    En la costa los turistas festejan el buen tiempo y la excelente temporada. El hombre lo escucha en las noticias y sale furioso a repasar el rebaño descarriado.
    Apenas imperceptible, saborea un olor a tierra mojada que le devuelve el ánimoÂ...
- en algún lado está lloviendo-


Â"DaedalusÂ"
Laura Cristino     1.813.677-2
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Elegido por Carlos Maggi

Título: Â"Tiempo de esperaÂ"

A lo lejos, campos a perder de vista. Nunca venía nadie. Hoy pasó un hombre a caballo y lo saludó.
El  agua caliente en la caldera. Chupó la bombilla.
 - Bueno el mate, suspiró.
Vinieron los pensamientos. El cuerpo tibio de la mujer en la noche, gritos de niños corriendo, mucho trabajo.
 - Los recuerdos dónde tienen que estar, no se puede volver atrás, pensó.
Se rascó el brazo. La piel estaba áspera, seca y curtida.
Miró al animal echado a sus pies. El único que no se había ido. El perro se levantó, caminaba con dificultad.
- Viejo como yo, murmuró.
- No se puede quedar solo. Primero él. Después que me lleve el  tiempo.
Era su deuda de gratitud.
Respiró hondo,  con cansancio, cerró los ojos y se sintió tranquilo.


Â"MariposaÂ"
Marisa De Goes Brum  1.071.412 - 0
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Cuentos finalistas

Tercer premio.

Título: Â"Es tiempoÂ".

La calle está anegada. La lluvia castiga sin piedad los paraguas de los  que osan desafiar al temporal y solo algunos adoquines se animan a asomar por sobre la marea liquida. Las luces de los faroles quedan atrás en vertiginoso desfile mientras corro lo más rápido que me permiten mis piernas. Sudando angustia y maldiciendo charcos. No hay tiempo.  Es allí, al final de la calle y la luz está encendida. Aporreo con manos de yunque  la puerta de madera y mi grito astilla la cerrada noche: ¡Comadrona, ya es hora!

Â"PopeyeÂ"
Julio César Pellegrini  1.244.399-9

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Segundo premio:

Título: Â"La preguntaÂ"

Â"Entró al consultorio sin ayuda y pudo hablar de algunas banalidades.

¿Será cierto que el tiempo está cambiando? Mire si no esas lluvias imparables de la primavera.

Cuando su esposa nos dejó a solas le cambió la cara y me buscó los ojos. Pensó una oración más larga y más perfecta, más ajustada a lo que debe ser en estos casos. Sin embargo apenas pudo decir dos palabras:
-¿cuánto tiempo?Â"


 Â"GALENOÂ"
 Alvaro Giordano              3.502137-2

   
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Primer premio.

Título: Â"El tiempoÂ".

Llegó caminando desde la carretera.
Hizo a un lado la cortina que cubría la puerta del bar y entró.
Preguntó al hombre del mostrador que le indicó adónde y cómo llegar.
Él sabía, pero tenía miedo de saber.
En una mesa, un vaso con vino y don Pedro que, al reconocerlo, entre dientes mascullaba su bronca.
Anduvo bajo la llovizna de la tarde fría.
Llegó. Golpeó las manos.
Dos perros salieron a ladrarle. Esperó.
¡Fuera..!, desde adentro gritaron a los perros.
¿Sí..?
Soy yo, vieja, dijo el hombre.
Ella miró al extraño.
¿Cuál...? ¿Quién..?
Dilmar.
Una sonrisa hueca, unos pasos vacilantes, cortos y lentos y un abrazo muy fuerte y muy largo.
ViejitaÂ...,¡treinta años..! Y, sin decirle toda la verdad, agregó como disculpa: ¿Sabe madre?, el trabajo, la política, la vidaÂ...
¿El viejo?, se animó.
Por allá anda, respondió ella, señalando, con su cabeza, los muros blancos del camposanto.
Y mientras, en una pava, calentaba agua para el mate, como si fuera ayer, preguntó:
¿Comió algo m’hijo?    


Â"Don SegundoÂ"

Diego Lamas 743.558-7

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