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Oreiro: "Mi papel en 'Wakolda' es siniestro y alucinante"

Natalia Oreiro en Wakolda.
Natalia Oreiro en Wakolda

La actriz uruguaya Natalia Oreiro interpretó en "Wakolda" uno de los personajes más jugados de su carrera. En entrevista con Espectador.com, Oreiro contó cuales fueron los principales desafíos y satisfacciones de interpretar el personaje de una madre que pone a su hija en una situación de peligro con uno de los personajes más macabros de la historia: Josef Mengele, "El ángel de la muerte".

Por: Victoria Carrascosa

Estás nominada a "Mejor Actriz" en los Premios Platino que se celebrarán el próximo 5 de julio en Panamá ¿cómo fue tu experiencia en "Wakolda"?

"Wakolda" fue una experiencia maravillosa, fue intensa porque está basada en una novela de Lucía Puenzo y en hechos hipotéticamente reales, porque no sabemos a ciencia cierta si Josef Mengele (médico nazi reconocido por sus experimentos con detenidos en el campo de concentración de Auschwitz) estuvo o no en la Patagonia argentina, aunque hay muchos indicios que dicen que sí.

Mi personaje interpretaba a la madre de la protagonista, que es una niña de 11 años y con un retraso en el crecimiento. También tiene otros dos hijos y está embarazada. Deciden con su pareja (interpretado por Diego Peretti) mudarse al sur en el final del verano del 59' y en la Carretera Nacional 33 (conocida como la "Ruta del Desierto") rumbo a Bariloche –donde piensan reabrir la hostería de los padres de ella- se cruzan con un forastero que les pide ir en caravana por la peligrosidad de la ruta.

Finalmente llegan a Bariloche y el forastero se termina convirtiendo en el primer huésped de la hostería. Ellos desconocen quién es esa persona a la que están alojando, que se trata de Mengele. Él comienza a tener una relación muy perturbadora con la familia, especialmente con Lilith (la hija de la pareja), especialmente cuando el médico propone hacerle un tratamiento con hormonas de crecimiento. Mi personaje accede un poco por la fascinación que éste ser despierta y otro poco por la necesidad de que su hija sea un poco más normal. Yo me escucho hablar y me pregunto, ¿cómo una madre puede acceder a semejante locura? Eso lo fuerte de mi personaje.

Hace unos días El Espectador habló con Lucía Puenzo, quien también está nominada en la categoría de "Mejor Director" y "Guión",  y nos comentaba que tuviste que aprender alemán para interpretar a tu personaje de Eva en "Wakolda", ¿cómo fue ese proceso?

Fue fascinante, es prácticamente la parte más divertida de mi oficio: jugar a que uno es otro, tan otro que habla distinto. Para un actor hablar en una lengua que no es la madre es muy dificultoso porque las intenciones y emociones uno las piensa en español, y cuando lo tenés que traspasar a otro idioma- uno tan lejano y duro para nosotros como es el alemán- hay una barrera interpretativa a sortear.

Aprender alemán de cero- por fonética, obviamente- fue todo un desafío, una maratón de dos meses a diario con un profesor alemán. De hecho, terminó la película y no me acuerdo de nada.

Aunque en 2012 protagonizaste "Infancia clandestina", un largometraje que transcurre durante la última dictadura militar argentina, estamos acostumbrados a verte en papeles de comedia, como el que hacés en "Solamente Vos" junto con Adrián Suar. ¿Qué fue lo que te llamó la atención de "Wakolda" para volver a incursionar en un género dramático?

"Infancia clandestina" fue una película en la cual yo pude tomar un compromiso distinto. Hice un personaje muy dramático y duro al mismo tiempo; me brindó mucha satisfacción y también me permitió acceder a otro tipo de personajes para los que quizás los directores no me tenían tanto en cuenta.

Después de que Lucía (Puenzo) vio el material crudo de mi trabajo en "Infancia clandestina" me propuso trabajar en "Wakolda", pero no con el personaje que ella había pensado para mí, porque el personaje de Eva iba a ser interpretado al principio por una alemana, pero luego no pudo ser porque quedó embarazada. Fue ahí cuando me preguntó: "¿qué pensás del personaje de Eva?", " es un personaje siniestro, alucinante", le respondí. Y a mí me encantan las películas de Michael Haneke (director y guionista de cine austríaco conocido por su estilo sombrío y turbador), así que me podía ver interpretando a esa madre.  

También protagonizaste la serie de televisión "Lynch" en 2012, de suspenso ¿en qué género te sentís más cómoda?

Creo que tiene que ver con el proyecto. Uno puede tener más afinidad por su personalidad, en este caso, yo tengo claramente una personalidad más cercana a la comedia, disfruto mucho hacerla en televisión, me parece algo digerible, espontáneo y me divierte mucho.

El cine tiene otros tiempos en los cuales uno puede elaborar más los personajes, desmenuzarlos más, bucear más en sus sentimientos. Ahí me divierte mucho jugar con el drama. Es lo lindo de la composición: poder mostrar distintas facetas.

No me gustaría definirme en un rol, disfruto mucho hacer todo, pero creo que en televisión, un drama muy pesado me costaría mucho sostenerlo durante un año, porque uno se convierte en el personaje.

En "Solamente vos", aparte de la actuación, te reencontraste con la música. ¿Tenés pensando volver a los escenarios?

Cantar es algo que está muy ligado a mí, que yo disfruto hacer y está buenísimo ponerle eso a los personajes que uno interpreta. El año pasado hice una gira por Rusia y Polonia y ahora regreso en abril a un festival de música muy importante que hay allí. A mí me gusta mucho viajar con la música, es mi manera de comunicarme con el público y verlos ahí cara a cara y que te transmitan lo que les pasa.

Desde "Muñeca brava" seguís siendo toda una celebridad en Rusia ¿Tenés algo para opinar con respecto al conflicto que viven actualmente ese país y Ucrania por Crimea?

Lo más importante es la unión de todos los pueblos; en Latinoamérica estamos muy concentrados y centrados en eso.

Las guerras políticas son un sufrimiento para todas las personas. Que la gente pueda vivir en paz, en comunión con el otro, respetando las ideas de los demás es algo muy necesario para toda la humanidad.

Conozco muchísimo, de hecho viajé a Ucrania y viajo todo el tiempo a Rusia. Tengo muchos chicos que vi crecer en estos países y obviamente el conflicto me toca en lo profundo, me genera angustia.

Después de "Solamente Vos" y "Wakolda", ¿cuáles son tus planes?

Actualmente estoy trabajando en una película con Benjamín Ávila (con quien trabajó en "Infancia Clandestina") que está basada en la vida de Juana Azurduy. Al mismo tiempo estoy en la lectura de distintos guiones.

¿Tenés planes de hacer algo en Uruguay? Por ejemplo, incursionar con tu marca de ropa Las Oreiro.

Con Adri, mi hermana, siempre pensamos ir y decimos "¿cómo (Las Oreiro) no está allá en Uruguay?". Pero no es tan fácil, es toda una inversión. Nosotras somos una empresa familiar, la marca creció mucho en estos últimos seis años y queremos hacer las cosas muy de a poquito, pero obviamente que pensamos en Uruguay todo el tiempo.