A partir de los testimonios de distintas historiadoras, Quirici analiza el lugar de la mujer en la primera gran contienda mundial a partir de una perspectiva femenina, cuestionándose si la guerra significó el camino hacia la libertad de la mujer o un simple paréntesis ante una excepcionalidad que, una vez finalizada, volvió a poner a los sexos en su sitio. 

El profesor aseguró que durante mucho tiempo se entendió a la Primera Guerra Mundial como el acontecimiento qe dio lugar a un "proceso de emancipación femenina", en donde la mujer adquiere nuevos roles y oficios.

Sin embargo, si bien en este contexto, las mujeres comenzaron a demostrar que son capaces de ocupar roles masculinos, Thébaud afirma que a su vez, también se da un proceso en el que se reivindica el lugar del hombre como el protector de la comunidad y la madre patria, delegándose a la mujer al cuidado de la familia.

Es por ello, que el profesor sostuvo que la Primera Guerra Mundial fue solo un anticipo en cuanto a la redefinición de la relación masculino-femenina, y que el verdadero sacudón de género se dio en la década de los '70.