Probablemente muchas personas estén de acuerdo que los adivinos, sean psíquicos, tarotistas u otros, hacen de la superchería un negocio. ¿Pero qué ocurre con las religiones? Para Blasina, la Iglesia Católica también hace de la irracionalidad un negocio. "El papa Francisco es un negocio a mucha mayor escala, vende nada y recolecta millones"; afirmó. "Eso para nosotros es una estafa";.

Consultados sobre qué opinan de las clases de catequesis, o darle a los niños una educación religiosa de otra tipo, Loy dijo: "Lo peligroso es instalar el pensamiento mágico en igualdad de condiciones que el científico. Instalar la espiritualidad como un elemento positivo en nuestra formación y cosmovisión". Para la antropóloga, si bien es aceptable para un niño creer en cosas que no ve, a medida que crece, si no tiene hipótesis para sustentar la existencia de "seres mágicos";, tiene que "empezar a pensar con otros parámetros";.