El cronista estrella de Monte Carlo se alejó (o fue alejado) de ese medio a partir de la aparición de un video donde aparece haciendo chistes subidos de tono. El mismo circuló en distintas redes sociales con el nombre de "Rody Silva en pedo";.

"No estaba mamado. Yo no tomo. Si un día tuviera la oportunidad de trabajar con ustedes van a ver que cuando vamos a la pausa me pongo a contar chistes. Es una de las grandes pasiones de mi vida. Si les muestro mi teléfono en este momento, si ven mi whatsapp, van a ver" explicó Silva.

"Yo largaba la tanda y me ponía a contar chistes con la gente que estaba conmigo. Y entró un muchacho que venía de Treinta y Tres a vender salamines y quesos. Muerto andaba, con un carrito por la calle vendiendo. Y me dijo 'Ay, dejame sacarte una foto'. Mentira, no me estaba sacando fotos, me estaba filmando. Eso después se lo pasó a otra persona de los medios que se ocupó que ese video llegara a todos los dueños de los canales de Montevideo y a los dueños de las agencias de publicidad, a los efectos de ver que me retiraran la publicidad" relató Rody.

"Me hicieron la cama. Bien hechita, de dos plazas" sentenció el cronista. Le preguntamos quién fue la persona que divulgó a los medios el video. "Sé quien es, no lo voy a decir, pero sé. Un colega de mis pagos. Le dije que yo sabía que había sido él y ya está. Lo negó, claro".

Pese a esto, Rody aseguró que ha tenido varias ofertas de trabajo en distintos medios montevideanos, pero que no aceptó ninguna de ellas. "Adoro Montevideo, hubo ofertas para venirme a trabajar, pero ni borracho: yo estoy allá en Melo, gano menos plata, pero lo que gano en tranquilidad..."

Inicios

Tal vez por conocer la frontera, Rody conoce el oficio del contrabando y la picardía. "Fabricaba café. Café sin café, hacíamos maravillas. No dejaba nervioso a nadie, no era descafeinado, no era nada. Era con sorgo, porotos negros, trigo o maíz. Se le rompía una cosita de café Chaná a alguno por arriba, cosa que la gente oliera y dijera 'uy, qué rico aroma'. Y funcionaba fenómeno: la gente tomaba 14 litros y estaba cero kilómetro" relató el informativista.

"Mi madre se llamaba María Tort. Tort apellido escandinavo. De Thor, el dios de la guerra, solo que acá le sacaron la hache para hacerlo más fácil" nos contó Rody. ¿Pero queda algo del dios de la guerra en el cronista de Melo? "Yo soy muy manso pa’ las balas, nunca en mi vida tuve problemas. Tuve revólver un día, me prestaron una pistola, una Browning 765. Y vos sabés que fui a tirar un tiro con una bala brasilera, por supuesto, y se hinchó el caño, me asusté, y la llevé a una armería en Melo, que fue uno de los primeros robos de los Tupamaros. ¡Nunca más apareció!"

Le preguntamos a Rody por el rumor de que en Melo, no hace mucho, había boliches que no aceptaban la entrada de negros. "Toda la vida. Boliches sí, pero lo peor del caso... el Centro Unión Obrero, el Club Unión, lo más importante de la sociedad, no, ¿negros?, ¿cómo? Pasó en clubes de fútbol, como Peñarol. Yo no lo viví porque era muy chiquito, pero me contaron. Fue una delegación de Peñarol a jugar un amistoso. Fueron y... 'El señor no puede entrar'. '¿Por qué?' 'Es negro. Negros acá está prohibido'. Y fue 'Si no entra él no entra nadie'. Había un homenaje y todo, y quedó sin efecto".