Uno de los detalles revelados en el libro y que más sorprenden de la vida de Seregni, fue cuando se creó el Encuentro Progresista (EP). "Se crea el EP en el Palacio Legislativo, unos días antes de un congreso del Frente Amplio (FA) que debía confirmarlo. Y eso incluía el nombre de Rodolfo Nin Novoa como candidato a vice. Pero el Frente estaba muy dividido. (Jorge) Zabalza y (Helios) Sarthou no estaban de acuerdo. Mujica y Fernández Huidobro estaban más cerca, pero no mucho. Había una tensión muy grande. El Movimiento 26 de Marzo, votaba en contra también. Y lo que ocurrió es que Seregni creía que los votos eran muy importantes, y le pidió a sus colaboradores que le dieran una mano con esos votos. Él ordenó que los votos cerraran";, comentó Israel.

Para este libro "nosotros confirmamos y reconfirmamos la información. Había mucha gente que tenías ganas de hablar y otras personas que no. También muchos se cuidaron, porque no es fácil. Querían decir cosas, pero no podían por estar vinculados o por evitar nombrar a personas que están en el gobierno";, dijo Conteris.

El periodista dijo que este libro da una imagen "no tradicional del Seregni correcto y respetuoso. Lo que nos contaban, no podíamos dejar de publicarlo";, porque, según contó la periodista, "hay mucha gente que lo idealizaba, casi al nivel de la perfección. Yo me alegro y me deja más tranquila el Seregni que encontramos";.

Otro elemento polémico es la redacción de una propuesta que realizó Seregni para resolver cuestiones relacionadas a los detenidos desaparecidos. "Ahí es una discusión muy complicada no resuelta. Se trataba de la operación zanahoria. Un documento firmado por Seregni en la cual hace una propuesta: eso lo manda al jefe de Inteligencia Militar que estaba en 1998, Francisco Wins, buscando que cuando el FA llegara al gobierno poder tener acceso a información sobre los desaparecidos";, indicó Israel.

"Seregni siempre buscó el diálogo. Les reprochaba a los manifestantes esa cosa radical de gritar ‘paredón, paredón’ a los militares. Él habló de Justicia, pero no tenía esa concepción de las Fuerzas Armadas como institución. Veía a la cadena de mando del Ejército y pedía que la Justicia actuara sobre ellos";, señaló Conteris.

El periodista aseguró que "cada vez que se encontraba con militares en diferentes lugares, intentaba tender puentes. Una posición diferente a la del general (Víctor) Licandro –figura relevante en el Frente Amplio-, que era un militar de aquéllos duros, muy crítico y que pensaba que el Ejército debía depurarse y hacerse de nuevo";.

Dos momentos importantes en su vida fueron las renuncias tanto al Frente Amplio como al Ejército. "Es un acumule de cosas que lo van poniendo en una situación de tensión. En cuanto a su salida de las Fuerzas Armadas, llegó un momento en que o reprimía o se iba. Sobre la salida del FA, él sintió un cambio de mando y que él ya está de salida por la edad. Además, entendía que Tabaré Vázquez era el candidato de la gente, pero no el suyo. Él quería a Astori";, comentó la escritora.

En este sentido, Israel dijo que "cuando renuncia al FA, sigue siendo un referente en todo el mundo pero en el Uruguay empieza a chocar. Además, por cómo hace su discurso, lo acusan de traidor, queda en una situación muy incómoda. Él sigue yendo al Centro de Estudios Estratégicos de Defensa (del Colegio de Defensa), pero lo que tenía ahí era una secretaria y un teléfono, porque estaba solo. Él va al entierro de Pacheco, y dijo que ‘Pacheco siempre se manejó dentro de la ley’. Aunque dijo que era una dictadura, pero si se compara con lo que fue Bordaberry, trató de hacer todo lo posible dentro de la ley";.

Otro elemento por el que fue blanco de críticas en el FA, fue que en un momento dijo que "es importante respetar los Derechos Humanos de los dos lados’. Es decir: habla también de los secuestrados por el MLN también. Las críticas llegaron incluso desde el expresidente José Mujica";, puntualizó el autor.

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