Riccetto: "En mi carrera hubo un toque de buena suerte"
"Siempre me preguntan 'de todos los teatros en los que bailaste ¿cuál es el mejor?' para mà no hay nada como bailar en casa" declaró la primer bailarina del Ballet Nacional del Sodre (BNS), MarÃa Noel Riccetto, en La Mañana de El Espectador, y aseguró que no quiere irse nuevamente del paÃs.
Riccetto se convirtió en mayo en la primera uruguaya distinguida como mejor bailarina y premiada con el Benois de la Danse, en Moscú, el galardón más importante de la danza clásica en el mundo. Riccetto fue nominada por su rol de Tatiana en la obra 'Oneguin', que se estrenó en el Auditorio Nacional del Sodre en octubre del año pasado.
La entrevistada asignó la premiación a la buena formación que comenzó en la Escuela Nacional de Danza. "Aprendà mucho mirando, no solo haciendo. Es toda una vida dedicándome a lo mismo. En mi carrera también hubo un toque de buena suerte. Creo que es un poco estar en el lugar indicado, en el momento indicado, y a mà me ha pasado un poco de eso, de la mano de mucho trabajo, porque nadie me regaló nada", dijo la bailarina.
"Me quiero retirar a buen tiempo y que la gente diga ‘¿estás segura de lo que estás haciendo?' y no 'por Dios! sáquenla de ahà arriba!'", graficó la entrevistada.
"Siento una gran responsabilidad. Por momentos me agobia un poco, y por otros momentos disfruto mucho. Me parece muy interesante que haya pasado algo asà con una bailarina de ballet. Por lo general reconocen a jugadores de fútbol, a deportistas de alto rendimiento, un cantante, pero que la gente diga ‘esta es la Riccetto’ me llena de orgullo y me encanta que se relacione con la cultura", manifestó la bailarina.
"Tengo muchÃsimos compañeros que estuvieron durante los peores momentos de la compañÃa, que se bailaba con poquÃsimo presupuesto, las condiciones no eran las adecuadas, pero sin embargo lucharon, siguieron y sobrevivieron. La llegada de Julio (Bocca) fue tener contactos y el querer hacer las cosas de otra manera", contó Riccetto.
"En toda mi carrera tuve que tomar dos decisiones importantes, una fue la de irme a estudiar al exterior. Estuve casi quince años en total, mi familia me apoyó mucho, nunca me sentà sola en esas decisiones grandes. La segunda fue la vuelta a Uruguay, dejando Nueva York, a una compañÃa importante, y un buen puesto, para apostar a volverme, sabÃa que iba a estar buenÃsimo trabajar con Julio Bocca, vivir la renovación del BNS y a nivel personar estar cerca de mi familia", expresó Riccetto.
La entrevistada aseguró que Julio Bocca incidió mucho en su carrera. "Siempre le tuve muchÃsima admiración. Influyó en mi vuelta, porque nunca pensé volver a Uruguay a bailar, me imaginaba volviendo jubilada. Llegó un punto que yo querÃa estar en casa. Obviamente mi vuelta fue el 70% u 80% porque él estaba en el Sodre. Trabajar con él es fabuloso. Es difÃcil por otro lado, porque no es un tipo que anda con vueltas, sabe lo que quiere y lo quiere ya, para ayer, es exigente. Tiene la mentalidad de cómo manejó él su carrera, a base de trabajo y sacrificios. Quiere hacer las cosas bien, no anda con chiquitas", consideró Riccetto.
La figura del BNS contó que la vida de una bailarina es muy sacrificada. "Siempre me preguntan por el régimen de comidas, pero es algo super personal. Yo nunca me cuidé, no sé lo que es hacer una dieta. Como mucho", agregó.
Sobre sus clases de baile, instalada en Mad en Carrasco, Riccetto comentó: "no sé si tengo el talento de formar, me gusta trabajar con gente profesional que sabe lo que está haciendo. Me rodeé de gente que le apasiona el baile. Estoy muy a gusto y creo que la gente que trabaja conmigo también lo está".