La competencia se desarrollará en el Teatro de Verano y se extenderá hasta comienzos de marzo, contribuyendo a la consideración del carnaval uruguayo como el más largo del mundo.

El concurso otorga cinco premios, uno por cada categoría: humoristas, lubolos (compuestas por músicos y bailarines de candombe), murgas (conjuntos corales y musicales que interpretan letras satíricas), parodistas (grupos teatrales que parodian algún episodio histórico o personaje popular con humor) y revistas musicales.

Los conjuntos competirán en tres "ruedas" o fases, compuestas las dos primeras por once etapas y terminando en una tercera, denominada liguilla, a la que clasifican los mejores de las dos primeras ruedas y que tiene seis etapas.

Si bien todas las categorías son importantes en el carnaval uruguayo y tienen su público particular, las murgas representan gran parte de la cultura de esta fiesta popular, debido a que el contenido de sus espectáculos se basa en la crítica social y política a través del canto, el humor y la ironía.

Es por ello que es la categoría con mayor cantidad de participantes, ya que son 17 las murgas que competirán.

La Gran Muñeca es uno de los conjuntos con mayor tradición en el carnaval uruguayo por su antigüedad, ya que participó por primera vez en el carnaval uruguayo en 1921.

En 2016 fue la ganadora del concurso oficial y en 2017 quedó en el tercer lugar.

Uno de sus integrantes, Marcelo Pallares, dijo a Efe que las expectativas del conjunto para este verano son "pasar un carnaval divertido, pasarla bien y hacer el mejor espectáculo posible".

Además, el murguista explicó que para su conjunto lo principal es hacer un buen trabajo en los tablados y que a la gente le guste lo que la murga ofrece.

El espectáculo de la Gran Muñeca se llama "Murga, fiesta y carnaval" y estará dividido en varias partes. En principio hablará sobre "la fiesta en sí del carnaval" y sobre cómo viven esta celebración los murguistas para que "la gente lo entienda", aunque todo se hace "en clave de humor y de ironía".

Luego de ello, la murga intentará "armar un gremio" e imaginarse como sería un barrio de murguistas.

La cuestión política no estará ajena al espectáculo de la histórica murga debido a que en la segunda parte del espectáculo le pedirán a los políticos "que rindan cuentas" sobre lo hecho hasta el momento y lo representarán "con todos los personajes que ocupan cargos de Gobierno".

Todo este segundo acto, que en las murgas se denomina cuplé, tendrá títeres "prácticamente de tamaño natural" de cada uno de los políticos que criticarán.

Por otra parte, también se tratará todas las formas de acoso hacia las mujeres, algo que hoy está presente en la sociedad y que "se está tratando de combatir de una manera bastante más eficaz que antes".

Pallarés es un histórico murguista que vuelve a la Gran Muñeca tras 20 años y que ha estado en otros conjuntos importantes como los Curtidores de Hongos o, la última campeona, Don Timoteo.

Su retorno a esta murga lo ilusiona porque si bien "su título es tradicional" cuenta con mucha gente joven y en los últimos años la murga consiguió marcar un sello que tiene "mucho reconocimiento en las calles". EFE