Oña al hablar de Sabina Spielrein, en quien se basa la obra dijo que se debe entender que la esquizofrenia tiene su propia forma de expresarse en el mundo.

Spielrein  fue una psiquiatra y psicoanalista rusa de origen judío. Fue una de las primeras mujeres en la historia del psicoanálisis, siendo su principal aporte teórico la elaboración del concepto de «pulsión destructiva y sádica» con base en el cual Freud desarrollará más tarde la pulsión de muerte.

"Por lo general la información que recibimos es que fue amante de Jung y se quedan en un chusmerio histórico y no dicen el aporte que dio esta mujer" sentenció la actríz.

También expresó que el hecho que hubiese estado enferma sicologicamente generó un estigma y eso es otro factor de porque no dejan ver sus aportes.

"Tenemos un monton de referencias de Sabrina de sus apotes en sus diarios, hay cartas que dejan ver claramente su linea de pensamiento, eso aporta muchísimo al personaje para encontrarlo" relató Oña.

Sobre la recepción del personaje en particular la dramaturga recordó que un artista soberbio y otro con amor tienen diferencias y el publico siempre se da cuenta