Oír con los ojos

El cuento que Tchaikovsky leía a sus sobrinos

El Ballet Nacional del Sodre abrió su Temporada 2018 con 'La Bella Durmiente'. Sobre la historia, los personajes, los símbolos, el doble reto de brillar bailando y actuando, Oír con los ojos conversó con dos de sus protagonistas: Vanessa Fleita y Joyce Alves.

Cuando a mediados de 1888 Ivan Vsevolozshki, director de los Teatros Imperiales rusos, sugirió a Tchaikovsky que su nuevo ballet estuviera basado en el popular cuento de la princesa, las hadas buenas y el hada mala, el pinchazo, el sueño y el beso, conocido sobre todo a través de las versiones de Charles Perrault (1697) y de los hermanos Grimm (1812), el compositor estuvo encantado: La Bella Durmiente era el cuento favorito de los hijos de Sasha -Aleksandra Davydova, la hermana menor del músico- y Tchaikovsky lo había leído para ellos muchas veces, por lo que lo conocía de memoria y sabía que era perfecto para un ballet.

Marius Petipa, legendario coreógrafo del Teatro Mariinski, preparó la sinopsis del argumento. Tchaikovsky trabajó con entusiasmo, cuidado y esfuerzo, quizá más que en cualquiera de sus obras anteriores. La partitura estuvo lista a fines de agosto de 1889, y llevaba la dedicatoria a Vsevolozshki.

El estreno se produjo el 15 de enero de 1890 y dejó al compositor algo triste: los asistentes, el propio zar (Alejandro III), se cuenta, lo recibieron con frialdad. Habrá sido la única vez; desde aquel momento y hasta nuestros días La Bella Durmiente es uno de los ballets favoritos del público, ligeramente menos celebrado que El Lago de los Cisnes o Cascanueces pero igualmente reconocido como una obra de genio.

El BNS lo presenta, del 15 al 29 de marzo, con coreografía del maestro argentino Mario Galizzi, basada en la coreografía original de Petipa. Vanessa Fleita y Joyce Alves interpretan distintos papeles pero significativamente, el Hada Carabosse y el Hada Lila, grandes protagonistas de la historia.

Más detalles sobre la producción del BNS: Aquí

Fragmentos de la música de La Bella Durmiente por la Orquesta del Teatro Mariinski, dirigida por el maestro ruso Valery Gergiev.