La ciencia le teme a la religión
Hay tan pocos estudios científicos sobre los eventos religiosos que el periodista de DW Zulfikar Abbany dice que pareciera que la mayoría de los científicos preferirían no tocarlo y se abuchea a los que sí se atreven.
¿Por qué la ciencia y el periodismo tienen tanto miedo de abordar, ya sea probando o desaprobando, algunas de las proposiciones más grandes y sin resolver de nuestra existencia humana? Es Pascua. Entonces, sí, estoy hablando de eventos de importancia religiosa, como la resurrección de Cristo.
No puede ser solo porque es demasiado difícil. Hay astrofísicos que dicen que han "escuchado" el big bang. Y periodistas que dicen que pueden explicar los mercados financieros y otros males sociales. Pero pocos se atreverían a tratar de explicar milagros como la multiplicación de los panes, Jesús caminando sobre el agua o la resurrección.
¿Pero no son preguntas fascinantes?
Consideremos la resurrección, por ejemplo. Se sabe que ha habido personas que han "vuelto de la muerte", cuyos corazones se detuvieron y reiniciaron, y aún así, incluso en nuestra era de medicina moderna, no comprendemos del todo qué sucede.
Los científicos también son creyentes
Mi sensación es que hemos sido intimidados por nuestro propio temor a ofender a los fieles y por su respuesta. Pero necesitamos desesperadamente romper eso.
Muchos de los primeros filósofos occidentales eran profundamente religiosos. Usaron la investigación para comprender y explicar como fue creada o formada la naturaleza. Podía ser un asunto peligroso a veces. Algunos, como Giordano Bruno, fueron quemados por herejía.
Pero la Iglesia también apoyaba la investigación científica, y como el filósofo Steven Nadler me dijo una vez: "Ellos solo intervinieron cuando las conclusiones de esa investigación, o el pensamiento, chocaron con los dogmas de la fe católica o parecían inconsistentes con lo que la Biblia proclamaba que era verdad".
"La lamentación por la muerte de Cristo", lienzo de 1606 de Annibale Carracci
Pero tenga esto en mente: Nicolás Copérnico, quien ideó la teoría heliocéntrica de nuestro universo (que dice que todo gira alrededor del sol), era religioso y se dice que tuvo una buena relación con la Iglesia. Agréguese a eso Galileo, Newton, Descartes y Leibniz. Todos estaban entre los fieles.
La separación de la religión y la ciencia
La Enciclopedia de Filosofía de Stanford dice que la relación entre ciencia y religión ha sido "compleja" durante mucho tiempo y no siempre se han visto como algo separado. Pero esa complejidad es cierta para el cristianismo, el islam y el hinduismo, por nombrar a las tres religiones más importantes del mundo por número de seguidores.
"A medida que la vida intelectual musulmana se hizo más ortodoxa", sugiere Helen De Cruz, quien escribió la entrada en la enciclopedia, "se hizo menos abierta a las ideas filosóficas no musulmanas, lo que condujo al declive de la ciencia árabe. Las ideas científicas, como la teoría de la evolución, fueron identificadas con el colonialismo europeo, y por lo tanto tomadas con desconfianza".
El hinduismo, por su parte, es complejo ya que tiene escuelas religiosas y filosóficas muy diversas. "Los defensores de Chárvaka rechazaron la revelación védica y el sobrenaturalismo", escribe De Cruz, "y favorecieron en su lugar la observación directa como fuente de conocimiento". Cuando la India quedó bajo dominio británico, los hindúes "entraron en contacto con la ciencia y la tecnología occidentales", pero fue un "desafío asimilar estas ideas" con las creencias hindúes.
Ninguna teoría es 100 por ciento cierta y en parte es por esto que las ciencias se mantienen en movimiento. Nuestras ideas sobre el universo son verdaderas solo por "una convergencia de evidencia", escribe Michael Shermer, fundador de la Sociedad de Escépticos, de la revista Scientific American.
Una convergencia de evidencia parece un poco inestable para mí, pero es mejor que la "validación interna" en la que se basa una gran parte de la religión. La religión es verdadera porque la creemos, del mismo modo que Sigmund Freud creía que la religión era un intento de superar un complejo de Edipo.
Usted podría pensar que esta es una idea interesante, pero al igual que el milagro de la resurrección de Jesús, ¿cómo vamos a demostrarlo?
Quizás nunca lo hagamos. La única diferencia entre una ciencia como la psicología y los sistemas de creencias como la religión es que la psicología le abre las puertas a la posibilidad de tener la razón. La religión no necesita pruebas. Los hechos socavan el propósito entero de "tener fe".
¿Pero a quién le importa quién tiene la razón? Lo que importa es lo que es verdad, y algunas verdades pueden variar, pero solo lo averiguaremos haciendo esas preguntas difíciles.