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El artista señaló que se debe actuar profesionalmente para una persona, para tres o "para tres mil quinientas", reiteró que no solamente sirve que al actor se lo escuche por radio o verlo en la tele, se debe salir a que lo vean personalmente.

Acerca del espectáculo, el "leitmotiv" del espectáculo es ir a buscar a nuestro niño interior, la cosa lúdica y según afirma eso imparte a los seres humanos cierto sufrimiento, en este caso se pide que los espectadores procuren a su niño interior.

Gustaf dijo que ser actor es entregarse:

"No soy bueno técnicamente pero manejo una energía diferente a otros, a veces la técnica es buena pero se notan los hilos del armado, hay que buscar que simplemente que el humor suceda" sentenció.