(Emitido  a las 7.40)

EMILIANO COTELO:
El edificio inconcluso del Complejo de Salas de Espectáculos del Sodre volvió repentinamente a la vida en estos días.

Durante viernes, sábado y domingo albergó el Centro de Prensa de la Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno. Más de 1.000 periodistas realizaron su trabajo en las computadoras instaladas en lo que será la sala principal, la Sala Eduardo Fabini. Además, entre otras instalaciones, se utilizó la Sala Hugo Balzo para las conferencias de prensa de los líderes políticos.

De todos modos, sobre el final de esta cumbre se conoció una noticia que, por lo visto, permite concluir que este retorno a la vida va a ser algo definitivo, no sólo circunstancial, porque apareció una posibilidad muy concreta de financiamiento que permitirá la finalización del edificio.

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EC - Los fondos para culminar las obras serán de origen español. Así lo confirmó ayer el ministro de Asuntos Exteriores del gobierno de España, Miguel Ángel Moratinos, en entrevista con Radio El Espectador.

(Audio)

"MIGUEL ÁNGEL MORATINOS:
Sí, se está estudiando. Ha habido una petición. Estamos evaluando la financiación, el coste final de la remodelación, y entre el Ministerio de Asuntos Exteriores y las distintas comunidades autónomas queremos hacer un esfuerzo particular para contribuir a la finalización y remodelación final del Sodre. Habrá unas reuniones y veremos cómo y cuánto, y sobre todo de qué manera podemos participar en la remodelación final".

(Fin.)

EC - Repasemos cuál es la situación actual de este futuro Complejo del Sodre. Después de un largo proceso administrativo, que incluyó llamados a concurso y licitaciones públicas, la piedra fundamental del edificio se colocó a fines de 1989, durante el primer gobierno del doctor Julio María Sanguinetti. Desde entonces –hace ya 16 años– la construcción ha tenido marchas y contramarchas; y desde 2001 está congelada por completo.

¿Qué grado de avance tiene la obra? Aproximadamente 70%. Está construida ya la Sala Hugo Balzo, con capacidad para 300 personas, sala que en los últimos años ha albergado algunos espectáculos y que seguirá haciéndolo, aunque por ahora sólo esporádicamente. Las autoridades del Sodre pretenden que esta sala "forme parte de un todo" y por lo tanto recién se la incorporará al circuito cultural regular de Montevideo cuando el complejo entero esté terminado.

Además está muy avanzada la obra de la sala mayor, la Sala Eduardo Fabini, cuya capacidad será de aproximadamente 2.000 personas. (Para tener una idea de la magnitud de este espacio, en el Teatro Solís caben unos 1.200 espectadores.) En esta sala, cuyo escenario está prácticamente pronto, fue donde se representó, en el año 2001, la Ópera Aída, en condiciones muy particulares porque, entre otras cosas, faltan las butacas.

Pero este complejo comprende mucho más que estas dos salas. En el edificio se ubicarán además salas de ensayo para los cuerpos estables de coro, teatro y danza del Sodre, talleres de carpintería para el armado de las escenografías, talleres de vestimenta y zapatería, y un restaurante, entre otros servicios. Y cada una de estas obras, que hacen al todo, tiene distinto grado de avance.

¿Cuál es el futuro de esta estructura que comenzó a levantarse en el año 1989? Más allá de que se consiga terminar el edificio, ¿es viable su funcionamiento posterior? Vamos a conversar de estos asuntos con uno de los responsables del proyecto original y de la puesta a punto del edificio para esta cumbre, para albergar el centro de prensa. Me refiero al arquitecto Isidoro Singer.

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Arquitecto Singer, ¿cómo tomó la idea de que se emplearan las obras del futuro Complejo del Sodre, el edificio tal cual está, para sala de prensa para este acontecimiento?

ISIDORO SINGER:
Nos pareció fantástico, especialmente porque mucha gente que nunca lo pisó lo iba a conocer, iba incluso a descubrir sus potencialidades. Enrique Iglesias, que ha estado interesado en este tema desde hace muchísimos años, que es una persona enormemente inteligente, cuando le empezamos a explicar captó todas las posibilidades, que van más allá de los espectáculos, de ser un teatro. El complejo tiene un área que en este momento se pudo descubrir para el público, que es su lugar de congresos.

EC - Antes de pasar a esos aspectos, había espacios del complejo, como la Sala Hugo Balzo, que estaban prácticamente prontos.

IS - Sí, estaban prontos pero no tienen aire acondicionado, luz, los elementos de luz son pocos, no tenían equipos de audio. No sé si los que se pusieron van a quedar o no pero se pusieron a punto con una serie de instalaciones que desconozco si son alquiladas o no. Las butacas estaban, pero falta equipamiento. En el edificio en general no falta ningún muro, faltan revestimientos, pesos o equipamiento escénico, que son aspectos muy importantes.

EC - Los ascensores ya están funcionando.

IS - Sí, y también un enorme montacargas que recorre todo el edificio y que permite una conexión muy grande entre el acceso técnico y los talleres, que son más que los que usted mencionó, hay de carpintería, de herrería, de pintura, tres muy grandes y otros menores, todos conectados.

EC - ¿Algunas de las obras que se hicieron para albergar el centro de prensa van a quedar, sirvieron a los efectos del destino final del edificio?

IS - Sí, la conexión eléctrica de UTE, algunas cosas que se terminaron en el hall, pocas cosas. En mi opinión lo más importante fue su puesta en conocimiento de la gente, incluso de muchísimos gobernantes que nunca habían entrado, y descubrir una potencialidad que no es casual, cuando diseñamos el edificio tuvimos en cuenta ese aspecto, que nos parecía muy importante. Cuando la doctora Adela Reta estaba al frente del Sodre vino una propuesta, se quería realizar un congreso de organizadores de congresos, creo que en el año 2000, en Montevideo y si hubiera terminado el edificio habría sido la sede del encuentro de esa gente que mueve una industria que no es menor en el mundo.

EC - Si entiendo bien, esto tiene que ver con una discusión que cada tanto reaparece cuando la parálisis de las obras del Complejo de Auditorios del Sodre vuelve a plantearse. La discusión suele ser: ¿se justifica verdaderamente este edificio, no se trata de una inversión superflua? ¿Es viable un complejo de salas de espectáculos cuando ya existe el Teatro Solís, que fue refaccionado y que aún tiene pendiente una ampliación de obras, y cuando existe la Sala Zitarrosa para otro tipo de espectáculos musicales? Supongo que lo que venía comentando recién tiene algo que ver con este debate.

IS - Le voy a contestar a título personal porque mis tres socios no están en esta entrevista. En primer lugar, es como si usted dijera que tiene un hijo bajo y un poco gordo, ¿corresponderá el hijo o no? Es una realidad, no estamos diciendo "ahora vamos a hacer una tienda acá". Me parece un planteo muy absurdo.

En segundo lugar, ayer leí en un diario que se están abriendo cada vez más salas, unas más grandes, otras más chicas, incluso el Cinemetro se convierte en sala. Por algún motivo sobre el cual no nos vamos a extender en este momento, las salas de espectáculo y los espectáculos en vivo están vivos.

EC - Sí, hay varios ejemplos de los últimos tiempos. Está el caso de la sala de teatro Moviecenter, que ahora va a tener una sala asociada, se va a construir una nueva a esos efectos; está también la sala de la Escuela de Comedia Musical, que dirige Luis Trochón, que también está operativa; y ahora las obras que están teniendo lugar en el Cinemetro para llevarlo a este tipo de utilización.

IS - El edificio tiene tres vertientes: los espectáculos, los congresos –porque esto no fue un congreso pero fue algo parecido...

EC - Usted dice que esa utilización siempre estuvo prevista en el proyecto.

IS - No estaba en las bases pero nuestro enfoque lo llevó a eso, nos pareció que era un plus que creo que el jurado consideró. Y el otro tema muy importante es el área educativa, el hecho de que este complejo de espectáculos tenga una serie de áreas complementarias para el teatro va a permitir la formación de escenógrafos, vestuaristas, etcétera, aparte de la realización de otras actividades educativas que los teatros pueden traer aparejadas. De hecho, el funcionamiento del Solís, magníficamente gestionado por Grieco, lo demuestra, hay recorridas, etcétera. Aquí hay otras instalaciones que permitirían que el complejo se constituyera en un centro formativo; podría abundar en detalles.

EC - Volviendo un instante al potencial del complejo a los efectos de congresos y seminarios, usted dice que en Montevideo no hay un establecimiento dedicado específicamente a eso y que cada tanto se lo reclama. Casualmente, al lado se encuentra el Radisson Victoria Plaza, que tiene dependencias que también se utilizan para congresos y seminarios, como ocurrió en esta oportunidad.

IS - Sería complementario. Además no creo que el Radisson tenga un lugar que pueda albergar 2.000 personas con visión y comodidad, con elementos de proyección y de recepción. Las que conozco son áreas planas, horizontales, que se adecuan pero no tienen la presencia que puede tener una sala de este tipo.

EC - Se refiere a la Sala Fabini, concretamente.

IS - Claro, la Sala Fabini tiene una capacidad para 2.000 personas que escuchan y ven perfectamente todas, no se trata de un gallinero por allá arriba desde donde nadie puede ver. Es un lugar súper confortable, con una serie de salas de ensayo conectadas de una manera muy inmediata que permite que el desarrollo de comisiones, esta vez estaba preparado para sets de televisión.

Y también la Sala Hugo Balzo es complementaria, hay una serie de espacios y toda un área de video, que no fue vista pero cuenta con instalaciones, hay muchas áreas normales interconectadas y con luz que le pueden dar una enorme fluidez a un congreso para el funcionamiento de comisiones, encuentros menores, con servicios, proyecciones, en fin. El potencial es muy grande.

EC - Evidentemente una de las intenciones que estaban detrás de la utilización de este edificio en obra como centro de prensa era que se viera el estado de avance, que se observara su potencial para a partir de eso ver la posibilidad de que surgiera el financiamiento que está pendiente. En esa línea fue que finalmente se produjo la confirmación de que el gobierno de España, tanto el central como algunas de las comunidades, está dispuesto a poner ese dinero. ¿Qué le parece la noticia?

IS - Me parece fantástica. Iglesias ha hecho una labor muy fecunda, por lo que veo, es una persona que está interesada y que ha hecho diversos silenciosos esfuerzos por el complejo desde hace muchos años.

EC - Por lo visto le puso el broche a todas esas gestiones.

IS - Sin duda.

EC - Decíamos que la obra está en un 70% de avance. ¿Cuánto se ha invertido hasta ahora y por lo tanto cuánto falta?

IS - Hasta ahora se han invertido unos 60 millones de dólares. Y pienso que faltan en el orden de los 15, pueden ser 12 o pueden ser 20. Gran parte de los presupuestos pertenecen al área de maquinaria escénica y los temas tecnológicos han avanzado mucho con un descenso de precios, o sea que algunos aspectos tecnológicos –no precisamente las barras de la escena pero también– han sufrido cambios y han disminuido su precio, habría que reestimar el costo. En iluminación también, las cosas se han modificado muchísimo en calidad y en precios.

EC - Las conversaciones informales que hubo este fin de semana manejaban cifras del orden de los 30 o 35 millones de dólares.

IS - No estuve en las conversaciones informales pero con eso alcanzaría y estaría muy bien, sería maravilloso. Se me está esbozando una sonrisa, como usted podrá notar en mi voz. Me parece que se necesita menos.

EC - Tiene la impresión de que se necesita menos que eso. ¿Cuánto tiempo se requiere para terminar los trabajos una vez que esté el dinero?

IS - Se requerirá en el orden de un año y medio a dos. Para hacer la cumbre se hizo un esfuerzo, porque detrás de esto no está sólo el dinero, está el esfuerzo humano de montones de personas, porque hace 20 años que empezamos a trabajar en esto pero al pararse una obra luego no es fácil reencontrar los cables, metafórica y realmente, muere mucha gente, hay que ver en qué se estaba. Y como ese aspecto muchos otros, una obra parada es una pérdida brutal, al no usarse se desgasta más, algunas cosas se deterioran porque no hay manutención. Se ha ido haciendo una cierta manutención, pero la humedad, en fin. Por suerte son materiales muy firmes y la obra está muy bien. Usted estuvo dentro.

EC - Sí, fui de los que descubrieron en qué punto se encuentran los trabajos y de los que se impresionaron con algunas de las características del edificio, en especial con la Sala Fabini.

IS - Ahí lo critico a usted, porque es tarde para descubrir, tendría que haber ido antes.

EC - Sí, pero el equipo de En Perspectiva se ocupó de eso en varias ocasiones, en especial Rosario Castellanos, que es nuestra especialista en estos temas.

IS - Eso es verdad.

EC - Estamos todos muy ilusionados, vamos a esperar los detalles, las alternativas que vayan llegando desde España a medida que se avance en el estudio de este proyecto, pero todo indica que finalmente el Complejo de Espectáculos del Sodre va a ver la luz.

IS - Esperemos.

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EC - El arquitecto Singer integra su estudio con los arquitectos Jorge Dipólito, Diego Magnone y Juan Carlos Vanini; fue el estudio que en 1987 ganó el concurso de proyectos para este Complejo de Auditorios del Sodre. Desde entonces, además, están a cargo de la dirección de las obras.

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Edición: Mauricio Erramuspe