Especiales

Intervención de Carlos Maggi

Nos tratamos muchos años con Ruben y nos quisimos mucho, tuvimos una relación muy afectiva. No me gusta hablar de los amigos muertos, no hablo nunca, hoy tampoco voy a hablar. Cuando me decido a hacerlo después me arrepiento, como ahora, porque no me gusta. La fuerza, la imposición, la personalidad de Ruben Cotelo es mucho más importante que la del conjunto de críticos del 45 que en muy buena medida se daban problemas profesorales y encares profesorales. La característica fundamental de Ruben era que era un gaucho alzado, un librepensador, iba por la suya desde un punto de vista totalmente diferente y con mucha más fuerza que los demás. A mí me gustaba mucho.

No hace mucho tiempo, hace muy poco, dos o tres años, lo fui a ver un día para pedirle que prologara la edición número 10 de El Uruguay y su gente y me dijo que estaba loco. Le insistí mucho porque su opinión me importaba más que ninguna por esa misma condición que tenía de orejano. Al final lo convencí, empezó a escribir el prólogo y me iba pasando las páginas que iba escribiendo. Las páginas estaban bien, no estaban mal, estaba haciendo una cosa buena pero no le importaba mucho, me di cuenta de eso. Pero al cabo de ocho o diez páginas -el prólogo está escrito, así que tengo pruebas preconstituidas de lo que voy a decir- se soltó y habló de cualquier cosa menos del libro, y habló de una manera impresionante de lo que era la muerte.

Había un sentimiento trágico, ese prólogo es un documento fenomenal, que no tiene nada que ver con el libro, el libro no le importaba nada. A mí me gustaba mucho que lo escribiera aunque fuera así, pero nunca creí que arrancara de pronto con su verdadera vocación, su verdadera cosa: hablo de lo que quiero y como quiero, y si estoy sintiendo la muerte cerca de eso voy a hablar. Hizo unas diez o veinte páginas absolutamente inolvidables. Me quedé muy contento y publiqué ese prólogo que pudo haberlo en otro lado porque con el libro tenía poco que ver y conmigo también. Me gustó mucho eso que hizo Ruben, yo lo quería en ese plano y lo sigo admirando en ese plano.