- ¿Cómo te trata Catusa? ¿Es un viejo loco?

- Es, si. Él lo sabe perfectamente. Es bárbaro, derecho como una regla, es el que da el clima de Araca la Cana que es de los grupos humanos más sanos de los que he estado. Esto me está costando mucho sangre, sudor y lágrimas, lágrimas no, pero sí mucho cansancio y estoy muy satisfecho.

- Esto es como una despedida ¿o no? ¿podés ser director de la Comedia Nacional y trabajar en Araca?

- ¿Porqué no? Me gustaría combinarlo si fuera posible. Como yo ya dije dos años seguidos que no salía más en carnaval por mi exceso de trabajo. Si lo digo ahora y estoy el año que viene porque me convencen, ya la mentira es una farsa demasiado grande, entonces no voy a decir nada. Pero estoy cansado, muy cansado, tendría que estar en la playa. Pero sentir el público ahí, la adrenalina, el miedo...

- ¿Vos sentís miedo?

- Sí, el tipo que no sienta miedo no puede salir a un escenario.