El Destornillador

Las Leyes de la Conservación

Por Carlos Vera.

Hoy le voy a proponer a nuestros oyentes reflexionar y sacar algunas conclusiones sobre una anécdota que me llamó la atención, y la viví mirando el canal de cable Nacional Geographic y escuchando los comentarios de las personas que tenía alrededor.

Se trataba de unas escenas, típicas en estas documentales, donde una manada de cebras y sus pequeñas crías debían atravesar un río para continuar su travesía hacia una Sabana. Sumergidos en el agua del río y en la situación típica de acecho un tremendo cocodrilo esperando el cruce para la captura de su alimento,... que según el narrador de la documental, era la más tierna y chiquita de la cabritas.   Por supuesto que ocurrió la caza que la cámara estaba esperando.  En los instantes previos a que ocurriera la escena evidente de loo que se venía, los que me rodeaban pidieron a gritos cambiar de canal porque no querían ver la escena, porque era cruel y salvaje,....
¡cuánta carga cultural que tenía ese reclamo, de los que estaban mirando la escena en la TV!

Es que estaba quedando en evidencia otra relación natural: la del cazador y la presa, la del depredador y el depredado.  ¿O creemos nosotros que esta relación es diferente a la del Humano con la Vaca, o a la del Humano con las frutas, o con una lechuga?   Lo cierto allí, es que la víctima deja de existir para convertirse químicamente (por procesos químicos) en el cazador.  Pero esto también ocurre en otras relaciones de menor escala, que nos llevan hasta la relación que tiene una raíz de una planta absorbiendo las moléculas químicas de fertilizante (alimento, nutriente) para posibilitar el crecimiento de ese vegetal.
Cierto, ..... podría pensarse que este pensamiento es una visión cruel de lo natural.  Quizás, SI, sobretodo porque los humanos buscamos casi siempre "humanizar" estas relaciones depredadoras.   Pero son naturales!!!.

Esto es un patrón de comportamiento de la naturaleza en que vivimos, de la realidad que nos rodea.   Una y muchas veces hemos mostrado y demostrado en este espacio que la VIDA progresa, evoluciona, se asegura SÓLO a expensas de la Energía.

La relación entre dos estamentos de la naturaleza (cuyo concepto lo simplificamos con la pareja cazador/presa, el buscador y lo buscado) es una NATURAL COMPETENCIA POR LA FUENTE DE ENERGÍA, donde el organismo (vivo o inerte) más apto sobrevivirá sobre el menos apto o más débil.  

¿y qué tendrá que ver "el cocodrilo y la pequeña llama" con las Leyes de las Ciencias? ¿qué tendrá que ver todo esto con las Leyes de la Física?
 
Porque este hecho está acuñado en la misma base de la Ciencia: es que en el Universo en el que vivimos, ni un átomo, ni un "cuanto" de energía se escapa!  Todo está atrapado en este sistema cerrado que se llama universo. Y esto en las ciencias se conoce como "Las leyes de la Conservación", con el enunciado que quieras o que corresponda, pero dicho según el enunciado más popular: "Nada se crea, nada se destruye, sólo hay transformaciones".  Y bueno, es cierto,  este enunciado es cruel,... pero REAL.  La ciencia no nos mima, nos muestra la realidad y cómo funciona.

Bajo este principio, ¿cómo podrá entonces, el cocodrilo seguir viviendo si no se come a la cebrita?,.... ¿cómo podrá cualquier ente material del universo pretender la eternidad material sin que ello llevara al absurdo de que no hubiera más transformaciones?  
Esto justifica la existencia de los metabolismos (procesos químicos de transformación de la materia), para mostrar un ejemplo entre seres vivos. O justifica la existencia de los procesos de vida de las estrellas, desde que es una estrella, para luego ser una supernova (por que explota), luego una enana blanca (porque implota), luego un agujero negro (porque colapsa), por poner un ejemplo de un proceso con entes inertes.

"Nada se crea, nada se destruye, sólo hay transformaciones", se conoce como la Ley de la Conservación de la Materia, una Ley Física que parece regir imperativamente en este Universo. Mejor enunciada deberíamos decir: "En este universo, la materia ni se crea, ni se destruye, sólo se transforma".

Pero una palabra más sobre las Leyes de Conservación.

La materia en ciencia es el término general que se aplica a todo lo que ocupa espacio y posee peso. En la física clásica, la materia y la energía se consideraban dos conceptos diferentes, pero que estaban detrás de todos los fenómenos físicos de la realidad. Los físicos modernos han demostrado que es posible transformar la materia en energía y viceversa y con ello han probado que la materia es una sola.

Todo esto arrancó en 1743 cuando nació el químico francés Antonie Laurent de Lavoisier (fundador de la química moderna).  Los experimentos de Lavoisier fueron de los primeros experimentos químicos donde realmente se pudo medir que en cualquier reacción química (por ejemplo, la digestión de nuestros alimentos), la cantidad de materia es la misma al final y al comienzo de la reacción. Estos fueron los experimentos que en 1768 proporcionaron las pruebas para la ley de la conservación de la materia y la masa.

Las últimas pruebas las proporcionó Albert Einstein en 1905 con su famosa teoría de la relatividad en la que acuñó la conocida ecuación E = mc2. E de energía igual a m de masa por c al cuadrado, donde c significa la velocidad de la luz 300.000 kilómetros por segundo.  Esta ecuación dice que cuando los cuerpos tienen estas velocidades, como ocurre con las partículas producidas en las reacciones nucleares, la masa puede convertirse en energía y viceversa. 

Masa que es energía, energía que es masa,...y que ambos son materia.

Y que la materia en el Universo se conserva, ni se destruye ni se crea, por lo tanto si la cebra quiere seguir siendo cebra deberá comerse a los vegetales y si el cocodrilo quiere seguir siéndolo hasta el día de su muerte, deberá seguir comiéndose a la cebra.

Esto da para pensar.