Sin embargo, como todos los presidentes, el tema de las migraciones estuvo primero en la lista de puntos a tocar. "Cuando la migración era Norte a Norte no había muchos problemas, fácilmente se complementaban, se reconocían ciudadanías. Cuando es de Norte a Sur, es sin problemas, bien reconocida, aunque también implicó el saqueo de nuestros recursos. Pero ahora se criminaliza la inmigración de Sur a Norte. Ahora hay muros y hay deportaciones", recalcó.

El mandatario ilustró su crítica a las circunstancias que enfrentan los latinoamericanos que viajan a Europa con una anécdota: contó que hace unos años, siendo líder sindicalista, viajó a España. En el Aeropuerto de Barajas, donde hizo una escala, dos guardias de seguridad le pedían 500 dólares para dejarlo salir, o lo deportaban. Entonces, Morales señaló: "Me enojé y les dije que si por 500 años me saquearon, no hay 500 dólares ahora". Esos son los resultados de la inmigración Norte a Sur".

Para el mandatario, la salida a estos problemas pasa por que los países busquen mejorar las condiciones internas para que sus ciudadanos no se tengan que ir. Y dijo que en estos nueve meses de gobierno que lleva en Bolivia, ha intentado "cambiar las reglas internas con las empresas petroleras, aprovechar los recursos naturales para resolver los problemas económicos de la gente".

En ese sentido, señaló que antes de la modificación de la ley de hidrocarburos al Estado le entraban 230 millones de dólares por ese concepto. Después de la modificación de la ley ingresaron 500 millones y ahora con la nacionalización, van a ingresar al año 1.300 millones. "Queremos socios, no patrones. Y lo que dijimos antes de las elecciones lo concretamos, tenemos socios y no dueños de nuestros recursos naturales. En tres años entrarán 3.000 millones de dólares y esos recursos ayudarán a frenar la emigración", sentenció.

"Mientras no hayan políticas que permitan achicar esas diferencias de un país a otro, esas asimetrías, habrá migración. Las políticas liberales, neoliberales tienen que ser profundamente cambiadas. Hay globalización para ciertas mercancías, para ganancias de las multinacionales, pero no para el ser humano", afirmó.

Morales reclamó que haya comercio justo para los pueblos, que la gente que necesita mucho se beneficie de ello, o que hayan "derechos planetarios para el migrante". "Si todos pensamos que la migración es un derecho humano, hay que pensar que estas trabas tienen que terminar. Hermanos y hermanas que van a Europa también solucionan los problemas de los europeos", recalcó.