(Emitido a las 7.36)

JOSÉ IRAZÁBAL:
Una nueva sombra de dopaje sobre el fútbol uruguayo con dos jugadores jóvenes comprometidos. Mauro Vila, de Defensor Sporting, y Vicente Hermogeneo, de Rampla Juniors, arrojaron resultados positivos por la presencia de metabolitos de cocaína.

Ambos casos pertenecen a muestras tomadas en la decimotercera fecha del Torneo Apertura del fútbol uruguayo, en medio de la cual violetas y rojiverdes peleaban palmo a palmo para quedarse con el título y finalmente ganó Defensor.

FERNANDO ROSENBLATT:
Se espera que hoy asistan al laboratorio del Departamento de Control de Dopaje del Ministerio de Turismo y Deporte (MTD) para abrir la segunda muestra.

JI - El tema no es nuevo para el fútbol uruguayo. Se registraron por lo menos nueve resultados positivos de cocaína en 2007 y todavía quedan algunas muestras por abrir.

FR - Seis de ellos se dieron en el fútbol y faltan los resultados de varios análisis realizados el año pasado.

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JI - Estamos en comunicación con el profesor Fernando Cáceres, director nacional de Deportes.

Se habla de la intención del gobierno de comunicarse en las próximas horas con la Mutual de Jugadores por esta situación. ¿Es así?

FERNANDO CÁCERES:
Sí, de continuar hablando con la Mutual, en este caso retomar un diálogo que ya hemos tenido en otras ocasiones. Y hablar también con otros actores que intervienen directamente en el fútbol nacional.

JI - Existe preocupación en el gobierno por estos casos que se presentaron en 2007, pero ¿qué cantidad se daba en años anteriores?

FC - En el marco de la preocupación esencial por la salud de los deportistas del país, nos preocupan al menos dos circunstancias: la cantidad de casos positivos del año 2007, que estamos obteniendo, porque aún no se han abierto todas las muestras tomadas y el predominio absoluto de las drogas de abuso, entre ellas la cocaína. De modo que la preocupación viene por estos dos aspectos: por la cantidad de resultados positivos y por las características de las sustancias consumidas.

Nos preocupa la cantidad porque nos estamos acercando a los niveles del año 2003. En términos relativos los hemos superado. En 2003 se tomaron 384 muestras y se obtuvieron 20 casos positivos, de los cuales 13 correspondían drogas de abuso, nueve a consumo de cocaína y cuatro a consumo de marihuana. De aquellas 384 muestras pasamos este año a una cantidad significativamente menor, estamos por debajo de la mitad, fueron 158 en total, de las cuales hasta el presente hemos abierto 121, restan aún 37, y ya llevamos 13 casos positivos contra los 20 de 2003. Con menos de la mitad de las muestras ya tenemos un nivel muy alto de positivos.

Y el otro dato significativo es que 11 de los 13 resultados positivos corresponden a consumo de drogas de abuso, en todos los casos cocaína. Y conviene observar que en algunos casos se observan subniveles, que no llegan a declarar un positivo pero reflejan el consumo de esta sustancia. Hasta ahora llevamos ocho de estos casos. De modo que si a los 13 resultados positivos les sumamos estos ocho subniveles estamos por encima de los 20 casos del año 2003, tras haber abierto menos de la mitad de las muestras.

Este predominio de las drogas de abuso y, dentro de ellas, de la cocaína es francamente preocupante. Porque con estos dos casos nuevos de los futbolistas jóvenes de Defensor y de Rampla la cocaína supera por primera vez, en 35 años de historia de control de dopaje en Uruguay, a las anfetaminas, las efedrinas.

JI - Estamos hablando de una sustancia de consumo social, no tomada por los deportistas para influir sobre su rendimiento en la cancha.

FC - Sí, se conocen vulgarmente como drogas sociales pero figuran en la lista de sustancias prohibidas de la Agencia Mundial Antidopaje (ANA). Sobre los efectos del consumo de estas sustancias no hay una opinión única, por eso figuran en la lista de la ANA. Una opinión de la medicina internacional sostiene que sí pueden influir en el rendimiento y por lo tanto en el resultado deportivo, por eso están en la lista. Nosotros pensamos que el consumo de estas drogas responde a un comportamiento sociocultural contemporáneo que trasciende largamente la búsqueda de un resultado deportivo y de un mejoramiento del rendimiento. Por lo tanto también trasciende la responsabilidad exclusiva del MTD.

FR - ¿Cómo se traslada esta preocupación del MTD? ¿Qué medidas están pensando? ¿Qué políticas para llevar adelante? ¿Se está pensando en continuar algún trabajo con la Asociación Uruguaya de Fútbol y otras instituciones deportivas?

FC – Sí. Ya se han tomado medidas y estamos ensayando otras. Por eso la idea es retomar el diálogo con algunos actores con los que hemos venido trabajando durante estos tres años. Recordemos algunas cosas que han ocurrido y otras que ya se hacían antes de que asumiera esta administración de gobierno. En primer lugar, tenemos un Centro Médico Deportivo que cuenta con un jerarquizado equipo de médicos especialistas en este tema que han estado, no estos tres años, sino durante muchos años, a disposición de los clubes, brindando la información necesaria, realizando trabajos siempre que los clubes lo han solicitado, hemos publicado materiales de difusión, de divulgación, tanto de la lista de sustancias prohibidas como de los riesgos que se corren.

FR - ¿Los clubes recurren a la institución?

FC - Sí, habitualmente recurren a la institución y nuestros médicos siempre han respondido con celeridad y con la jerarquía profesional que los caracteriza. Hay clubes que realizan tareas de control propias y que están en permanente diálogo con nuestro equipo médico. No obstante, siempre se escapa algún caso a los controles de los clubes. Ese es un primer punto: contar con un plantel médico de alto nivel profesional a disposición de las instituciones deportivas, material escrito informativo, material gráfico, trabajos en talleres, etcétera.

Un segundo punto tiene que ver con dos modificaciones a un decreto presidencial que hemos realizado en estos tres años, propendiendo a reforzar las condiciones de recuperación y rehabilitación, en la búsqueda de un equilibrio entre una necesaria, ineludible sanción al deportista y otorgarle las mejores condiciones para su rehabilitación.

FR - Entre ellas está la reducción del tiempo para que el jugador vuelva a estar habilitado si solicita exámenes sorpresivos.

FC – Efectivamente. Porque nosotros suscribimos el Código Mundial Antidopaje que propone la ANA, que todos los países votaron en octubre de 2005. Ese código ha sido firmado y aceptado por todas las federaciones deportivas. La última federación fue la FIFA. Por lo tanto, este código se comenzó a aplicar en el fútbol a partir del 2 de enero de este año.

Si aceptamos ese código, las sanciones son de dos años para un consumo inicial y de por vida si el deportista es reincidente. En nuestro país hemos propuesto que esos dos años se apliquen de manera distinta: en el caso de las drogas de abuso, cuando identificamos sustancias como la marihuana o la cocaína, se le da la oportunidad al deportista de iniciar un proceso de rehabilitación y de retornar a la actividad antes de que se cumplan esos dos años. Los profesionales que trabajan con nosotros, tanto desde la medicina como de la psicología y otras ramas del conocimiento, nos han indicado que la integración a la actividad es un factor sumamente importante para la rehabilitación.

Hicimos dos modificaciones al decreto presidencial, una primera permitía a los deportistas solicitar la reconsideración de la pena a los seis meses de cumplimiento de la sanción y durante los segundos seis meses someterse a un seguimiento psicoterapéutico y a controles sorpresivos que realiza nuestro Centro Médico Deportivo. Si esos controles y el seguimiento terapéutico arrojaban resultados favorables, al año de cumplimiento de la pena el deportista podía retornar a la actividad.

Esa primera modificación al decreto fue sustituida hace no más de tres meses por una segunda que mejora aún más los plazos: el deportista que da positivo puede solicitar la reconsideración de la pena inmediatamente después de que se le comunica la sanción y si recorre el proceso de seguimiento psicológico y de controles de manera favorable, a los nueve meses puede volver a la actividad. Pero la sanción continúa hasta los dos años en la medida en que debe continuar con un seguimiento psicológico y con los controles sorpresivos.

FR - ¿Por qué se considera que la reducción de las penas es positiva para la rehabilitación?

FC - Por lo que le decía. Aunque en realidad no reducimos la pena sino el tiempo de inhabilitación del deportista para la actividad. Nuestros técnicos nos recomiendan que -en el marco del cumplimiento de las penas- se habilite un retorno prematuro a la actividad, antes de cumplir la totalidad de la pena. Porque el retorno a la actividad refuerza las condiciones de recuperación. Por el contrario, si el deportista permanece dos años alejado de la actividad, esto puede generar condiciones de mayor aislamiento e incluso no arrojar resultados positivos en el proceso de recuperación.

JI – Hoy, en el suplemento deportivo de Últimas Noticias, Fernando Barboza, dirigente de la Mutual de Jugadores, hace una crítica abierta a las autoridades, dice que hasta el momento –ayer a la tarde– nadie se había contactado con él por este tema. "Sabemos que el tema de las drogas le preocupa al Ministerio, pero verbalmente, no alcanza con decir que le preocupa, hay que accionar", dijo, haciendo referencia a una cierta lentitud del gobierno para reaccionar ante el tema.

FC – No. Yo estaba haciendo un repaso de las medidas que hemos tomado durante estos tres años, que no son pocas. Son muy importantes, no solamente para nuestro país sino a escala internacional.

Le completo el recorrido por estas medidas. Hace apenas unos dos meses se constituyó en nuestro país la Comisión Nacional Antidopaje, en la medida que ya veníamos observando este alto incremento en el consumo de drogas de abuso y que entendemos que esta problemática trasciende la responsabilidad exclusiva del MTD, constituimos esta Comisión Nacional Antidopaje que vincula a instituciones del ámbito público y privado. Por ejemplo el Ministerio de Salud Pública y el Comité Olímpico Uruguay, en la búsqueda de políticas más generales...

JI - El tema es cómo llevar eso a políticas activas. Barboza daba un ejemplo interesante. Decía que la Mutual tiene todo un plan para actuar en divisiones juveniles, explicar a los chicos qué es la droga, cómo evitar el consumo, al futbolista profesional explicarle bien lo que significa, que aunque a algunos no les guste, la droga está instalada en la sociedad y no es para beneficio del deporte. "Es un tema que nos preocupa y mucho, incluso le dejamos al director de Deportes, Fernando Cáceres, varias hojas explicando en qué consistía el trabajo, cómo iban a ser las charlas, quiénes eran los participantes y que además estábamos abiertos a todo esto", dice Barboza.

FC - Lamento no compartir lo que dice el integrante de la Mutual. Vamos a hablar con la Mutual como una de las instituciones iniciales en la recuperación de este diálogo institucional que hemos sostenido durante estos tres años precisamente por algunas manifestaciones de este mismo tenor que ha realizado públicamente en los últimos tiempos. La Mutual ha manifestado su deseo de participar en programas, pero las iniciativas presentadas no han colmado nuestras expectativas. La Mutual trabajó con nosotros en la modificación de los decretos presidenciales y francamente hemos visto una tendencia a buscar la eliminación de las sanciones a los deportistas; cosa hacia la que no tenemos una actitud favorable.

JI - Pero esta propuesta de trabajar con jóvenes es interesante...

FC - Ya lo venimos haciendo. Por eso le decía que nuestro equipo médico viene trabajando desde hace mucho tiempo, efectuando recomendaciones, realizando talleres, difundiendo material bibliográfico y material propio de la Dirección Nacional de Deportes y de la propia ANA. Y tenemos algunos programas ya conversados con la oficina regional de la ANA, que está instalada en nuestro país.

Desde el ámbito de los propios actores del deporte, en este caso de la Mutual, debemos eliminar esa tendencia a pensar en la mínima sanción posible para los deportistas, tratar de buscar las razones de fondo de este comportamiento y tener actitudes colectivas interinstitucionales en la búsqueda de respuesta.

En este caso, la Mutual ha declarado públicamente su voluntad de sumarse a estas iniciativas, pero lamentablemente no se ha podido concretar en el trabajo cotidiano que realizamos. Por eso el afán de reunirnos con ellos para convencernos entre todos de que las reducciones de las penas están limitadas, por un lado, por la normativa internacional que nuestro país ha suscrito y por la necesidad de sanción de estas conductas que son antideportivas y que atentan contra la salud del deportista; más allá de que sepamos que el consumo de drogas de abuso está extendido internacionalmente y que lo que ocurre en nuestro país no es sino parte de ese fenómeno.

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Edición: María Eugenia Martínez