La contundente victoria de Nacional comenzó a construirse con el descuento de Richard Morales en el minuto 45 de la primera parte. Y seguramente la charla técnica de los dos entrenadores quedó marcada por este gol. Tan así fue, que Pelusso les aseguró a sus jugadores que si hacían un gol antes de los cinco minutos, el partido era de ellos, y tuvo razón.

Ya comenzado el segundo tiempo, en 8 minutos Nacional alcanzó el empate y River se quedó sin respuesta, además de sufrir dos expulsiones que lo dejaron aún más disminuido en el campo de juego y pronto para recibir los cuatro goles que terminaron aplastando al "tiqui tiqui".

Al finalizar el partido, haciendo referencia a las declaraciones que se dieron entre semana, Matías Cardaccio señaló: "esto le pasa a los que hablan de más (...)". En tono desafiante, el defensa tricolor prosiguió: "Se decía que nos goleaban y que jugaban tan bien... pero pasó como en los clásicos con Peñarol con aquello de la carne, después pusieron todas las figuras y ganamos también. Ahora el presidente de River decía que le pegábamos de punta para arriba y le ganamos jugando y después de ir tres goles abajo. Quedó demostrado que podemos contra todo".

Para Cardaccio, en el primer tiempo Nacional estuvo "durmiendo la pelota". "No sabíamos qué hacer, estábamos muy perdidos. Pero en el segundo tiempo le pasamos por arriba. Si seguimos jugando así somos campeones", sentenció.

Por su parte, Álvaro García, arquero de River, señaló que olvidarse de lo que sucedió ante Nacional "es imposible", y reconoció: "Sé que una parte grande del ambiente del fútbol va a decir que River afloja en las difíciles". Para el darsenero, River entregó la pelota al rival "y por ahí se perdió el partido".