Los tricolores y los darseneros parecían arrasar en los primeros seis meses de 2008, pero al pasar raya en julio a ambos les da signo negativo. Es que Nacional y River arrancaron en la lucha por el Clausura hasta la fecha 13, pero luego el campeonato se lo arrebató Peñarol que, como si fuera poco, también se quedó con los dos clásicos por torneos oficiales (4 a 2 en el Clausura y 2 a 0 en la Liguilla) -Nacional había ganado en enero de 2008 los clásicos por la Copa Ricard y Copa Suat-.

El tiqui-tiqui metía miedo hasta que los dirigidos por Gerardo Pelusso lo derribaron por 6 a 3 en la fecha 10 del Clausura. Allí River comenzó a caer, pero igual llegó a la final del Clausura, donde Peñarol se impuso por 5 a 3.

Los darseneros no tuvieron torneos internacionales, por lo que sólo le queda ganar la Liguilla; aunque las posibilidades son escasas: Peñarol y Nacional deben perder y River tiene que derrotar a los violetas. U otra chance: que River gane el domingo y los albos y aurinegros empaten. De darse estos resultados la definición será entre esos tres equipos, que quedarían con ocho puntos.

Pero también River puede quedarse sin Liguilla, sin Libertadores y sin Sudamericana. Esto sólo se puede dar si Danubio vence a Nacional (queda con siete puntos) o Rampla derrota a Peñarol (queda con seis unidades) y los darseneros caen.

Por el lado de Nacional, hay más ingredientes que se suman a un estado anímico caído para enfrentar a los de la curva en la última fecha de la Liguilla. Más allá de las importantes bajas, como la del arquero Alexis Viera y quizá el volante O.J. Morales, ambos referentes de este Nacional, también incomoda la renuncia del máximo ídolo tricolor en los últimos años: Richard "Chengue" Morales, que será suplantado por el ex Wanderers Sergio Blanco.

Nacional jugaba dos campeonatos simultáneos, Clausura y Libertadores, y en los dos lograba resultados positivos hasta que perdió puntos en el torneo local, entre ellos el clásico, quedó quinto con 31 puntos y fue eliminado en los octavos de final por el San Pablo de Brasil.

Ahora, los tricolores suman siete puntos en la Liguilla y están primeros junto con Defensor y Peñarol, por lo que tampoco tienen asegurada la Liguilla ni la Libertadores; sí la Copa Sudamericana.

De todas maneras, tanto los bolsos como los dirigidos por Juan Ramón Carrasco buscarán un premio que, aunque sea, le sirva de consuelo para equilibrar el primer semestre de 2008: la Liguilla y la Libertadores.