Con el arbitraje del húngaro Itsvan Meszaros, Brasil se impuso a Italia, por 5-3. Al final de los primeros 12 minutos, los Auriverdes ganaban por 1-0 (gol de Bruno).

Al cierre del segundo tiempo, 24 minutos de juego, Brasil vencía por 4-0.  Bruno y Sidney, en dos oportunidades, marcaron para los campeones del mundo.

André puso el 5-0 parcial en los primeros minutos del tercer tiempo. Luego vino la reacción italiana y con goles de Paolo Palmacci, Roberto Pasquali y Diego Maradona Junior, achicaron la palmaria ventaja de los Norteños.

En la final por el tercer puesto, Portugal derrotó por 5-4 a España. El "Botín de Oro" quedó en las manos del portugués Madjer gracias a los 13 goles marcados. Los dos restantes botines los ganaron el español Amarelle (plata, 11 goles) y el lusitano Belchior (bronce, 10 tantos).

El "Balón de Oro", premio destinado al mejor jugador del torneo, fue otorgado al español Amarelle, mientras que el "Balón de Plata" y el "Balón de Bronce", fueron entregados al brasileño Benjamín y al portugués Belchior.

Los "Guantes de Oro", una premiación otorgada por primera vez en esta modalidad, recayeron en el golero español a Roberto Valeiro. Todos estas condecoraciones estuvieron patrocinadas por la multinacional Adidas.

El Premio "Fair Play" se lo llevó la selección de Rusia, eliminada como la uruguaya, en cuartos de final.

La Federación de Fútbol de los Emiratos Árabes Unidos será la responsable de organizar el próximo Mundial, que se jugará el año próximo (2009).