A falta de tres carreras para el final de la temporada, empezando por la del domingo en el circuito del Monte Fuji, el piloto británico tiene siete puntos más que el brasileño Felipe Massa (Ferrari), su principal rival por el título en este estadio de la competición.

El año pasado, también estaba al frente de la tabla pero se desplomó en las dos últimas carreras y se quedó a un solo punto de conquistar el título en su primera temporada en la Fórmula 1, en la que compartía volante con el español Fernando Alonso.

"El año pasado llegaba a todas las carreras queriendo ganar y no pensaba realmente en el campeonato", explica ahora Hamilton, de 23 años. "Este año estamos centrados en el campeonato, en la importancia de terminar las carreras y puntuar".

Aunque podría haber ganado, su tercer lugar en Singapur hace dos semanas era un buen resultado teniendo en cuenta la deblacle de sus rivales directos.

Si gana el Mundial este año, Hamilton será el campeón de Fórmula 1 más joven de la historia, arrebatando ese título a Fernando Alonso. Su convivencia en McLaren con el español, campeón en 2005 y 2006 con Renault, dio lugar a una temporada plagada de polémicas.

"El año pasado aún era un poco joven y estaba muy excitado por el hecho de acabar de llegar a la Fórmula 1", recuerda. "Pasaron tantas cosas en esa primera temporada, sobre todo con todas esas polémicas, tenía tanto que aprender... Iba en cabeza del campeonato pero no entendía del todo bien la importancia de la situación".

"He aprendido de mis errores, he crecido, he superado una nueva etapa en mi vida privada y también soy un piloto más maduro", agrega. "Hoy me siento mucho más fuerte, tanto mental como físicamente. Por esta época el año pasado estaba completamente agotado".