"Para asegurar que las Copas del Mundo de 2010 (en Sudáfrica) y 2014 (en Brasil) tengan el éxito previsto -- si hubiera catástrofes naturales u otros actos -- hemos previsto hacer asegurar" estos dos acontecimientos deportivos, precisó el presidente de la FIFA Joseph Blatter, en una rueda de prensa en la sede de la organización en Zúrich.

Estos seguros "cubren un ataque exterior contra la organización, una catástrofe natural o no, que obligue a trasladar (el acontecimiento) a otro país o en el tiempo", señaló el secretario general Jérôme Valcke.

El presidente de la FIFA también tranquilizó sobre los efectos de la crisis financiera mundial, indicando que no tenía impacto sobre la federación. "Nos encontramos en una situación de privilegiados", afirmó Blatter.

"Por el momento no hemos perdido dinero y estamos bien organizados y equipados para hacer frente a la crisis actual, por la diversificación de los activos financieros", según Blatter.