La Segunda división había decidido adelantar su última fecha para el 9 de diciembre, cuando en principio debía jugarse el sábado 13.

De esta manera, los clubes de la "B" podían terminar el torneo sin pagar los sueldos de noviembre, y recién tener el compromiso de volver a pagar en febrero, para quedar habilitados a comenzar el torneo Clausura.

De esta manera, los jugadores de algunos equipos podían llegar a estar sin cobrar el sueldo tres meses.

Corbo se reunió con el presidente de la Mutual, Enrique Saravia, para pedirle que si es necesaria una final para definir el Apertura de primera división, los futbolistas de esos equipos restasen su licencia anual, a lo que Saravia respondió que si al 10 de diciembre todos los equipos de primera y segunda no pagaron noviembre, no solo no tendrán ese gesto si no que se parará el fútbol.

El presidente de la AUF se comprometió a que así será.

La "B" parece estar en problemas para cumplir ya que, entre otros inconvenientes, hay siete equipos, entre ellos el líder del torneo Fénix, que ya usaron el fondo de garantía que les de la AUF, y que equivale a dos meses de sueldos, por lo que deberán conseguir recursos propios para saldar las mensualidades.