La incertidumbre sobre quién será el sucesor del camerunés Eto’o parece agudizarse día a día. Nuevos nombres se agregan a la nómina. Por estos días evalúan contratos, costos y rendimientos.

Más allá de que el presidente blaugrana, Joan Laporta, manifestó públicamente que realizaría un esfuerzo por mantener a Eto’o en su club, Guardiola parece no tener pretensiones de contar con él.

A raíz de esta decisión, muchas negociaciones comenzaron y diversas posibilidades se manejan en el mercado.

Según trascendidos de Italia, el Inter estaría interesado en el camerunés y la operación se llevaría a cabo mediante un trueque, por el cual el sueco Zlatan Ibrahimovic pasaría al reciente campeón de Europa.

Por otro lado, el uruguayo Diego Forlán sigue dando que hablar por su rendimiento exhibido esta temporada en el Atlético de Madrid. Medios españoles informan que el "Pichichi" ya tendría alquilada una majestuosa casa en Cataluña para instalarse en la ciudad y comenzar de esta manera la pretemporada. La situación parece difícil, ya que la cláusula de rescisión en el equipo "Colchonero" es muy elevada.

Por último, este martes La Gazzetta dello Sport de Italia informa que el italiano Luca Toni, quien actualmente milita en el Bayern Münich mantuvo conversaciones con Pep Guardiola. El DT español le habría manifestado el interés por comprar su ficha para la próxima temporada. 

Cabe recordar que ambos mantienen una amistad, ya que compartieron club en el Brescia de Italia. Toni se encuentra concentrado con su selección de cara a la Copa Confederaciones, confesó que el diálogo con Pep existió y que el español  le habría manifestado el interés de contar con él para defender los colores del Barcelona.

Toni tiene contrato con el Bayern, pero la llegada del delantero Mario Gómez proveniente del Stuttgart, motivaría el alejamiento del italiano.

La incertidumbre sobre quién vestirá la casaca número 9 del Barcelona, recién comenzó y al parecer seguirá por unas cuantas semanas. Lo cierto es que el nuevo delantero deberá al menos igualar la marca del camerunés, el cual ostenta números para nada despreciables.