Insúa llega proveniente del América de México, equipo que lo marginó al inicio del pretemporada y le comunicó que no sería tenido en cuenta.

El "Pocho" pasó por varios equipos y países, pero en ninguno se sintió tan cómodo como en Boca. El jugador ya pasó la prueba médica y está a la orden para sumarse al plantel. "Estoy muy contento por todo lo que viene", sostuvo el enlace al diario argentino Olé.

Aún no firmó su contrato por un año a préstamo y con la opción de compra de dos millones y medio de dólares. De a poco Insúa ya palpita los entrenamientos en Casa Amarilla: "Estoy feliz porque vuelvo al club donde quería jugar".

Insúa fue prácticamente de los pocos jugadores que Basile pidió para su nueva etapa como entrenador "Bostero". Con un esfuerzo importante, los dirigentes accedieron al pedido y hoy día el "Pocho" arriba para poder repetir el multicampeonato obtenido en 2006.

La primer duda que sale a la luz es si Insúa podrá jugar junto con Riquelme, amo y dueño de la 10 azul y oro, y conductor natural de este equipo. Insúa no eludió estas preguntas y sentenció: "Román es un fenómeno. No vamos a tener problemas en compartir la cancha. Además, yo me puedo cruzar de enganche, él también moverse. Nos podemos complementar bien. Eso después lo va a determinar Coco, pero mi característica no es quedarme fijo en un lugar".

Lo cierto es que si bien Insúa tiene un carácter polifuncional en todo el frente de ataque, los enganches que arribaron al club de La Boca mientras Riquelme integraba el plantel, no tuvieron un desenlace auspicioso. Conocidos son los casos de Gracián, Castromán y Díaz; así como también los juveniles Chávez y Gaitán.

No obstante, Insúa se desempeña no solo de 10, también puede moverse de volante por izquierda, puesto que hasta principios de año ocupó Jesús Dátolo y que hoy en día nadie pudo suplir de la forma que se esperaba.

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