El estadounidense Michael Phelps y el serbio Milorad Cavic brillaron este viernes en el Mundial de natación, un día antes de su esperado duelo en la final de los 100 metros mariposa, mientras que cinco nuevas plusmarcas planetarias se establecieron en Roma.

Phelps se colgó un nuevo oro, récord del mundo incluido, junto a sus compatriotas en el relevo 4x200 metros libres, mientras que Cavic estableció una nueva plusmarca en las semifinales de los 100 metros mariposa.

La 'natación tecnológica' sigue rompiendo récords mundiales en la piscina del Foro Itálico, situando la cifra en 35 plusmarcas planetarias, que amenazan con estar fijadas mucho tiempo, ya que la Federación Internacional (FINA) oficializó el regreso en 2010 a los bañadores tradicionales.

En esta ocasión, los récords vinieron por parte del cuarteto de Estados Unidos (relevos 4x200 m, 6:58.55), la alemana Britta Steffen (100 m libres, 52.07), el estadounidense Aaron Peirsol (200 m espalda, 1:51.92), la sueca Therese Alshammar (50 m mariposa, 25.07) y Cavic (100 m mariposa, 50.01).

Los tres primeros conllevaron además el título mundial, mientras que el resto lo logró en las semifinales de sus respectivas distancias. Sin récord del mundo, también se proclamaron campeones en Roma-2009 el húngaro Daniel Gyurta y la serbia Nadka Higl, ambos en 200 metros braza.

Más allá de los resultados del día, el Mundial de natación calienta motores para el reencuentro entre Phelps y Cavic, el 'plato fuerte' de la penúltima jornada de la competición, un año después de su emocionante pulso en los Juegos Olímpicos de Pekín-2008.

En la capital china, el estadounidense se impuso por apenas una centésima, en un final que estuvo a punto de evitar su 'pleno de oros' y que se decidió por 'foto finish'.

"Es muy veloz (Cavic) y será como en los Juegos Olímpicos. Voy a descansar y tratar de poner un poco más de energía en los 25 primeros metros, porque es ahí donde él acelera", explicó Phelps.

Por su parte, Cavic, que batió la plusmarca mundial en su semifinal, se prepara también para el enfrentamiento con la gran estrella de la natación. "Soy capaz de bajar de los 50 segundos, lo que sería suficiente para ganar el oro", aseveró el serbio. "Si Phelps quiere un Jaked, que me lo diga y yo se lo compro", afirmó provocativamente Cavic.