El único gol del encuentro fue marcado por Federico Puppo a los 61 minutos tras un craso error del guardameta Andrés Gemio, que inexplicablemente soltó la pelota en un centro sin peligro dejando servida la pelota para el atacante de River.

Un minuto después de la apertura, un hincha del equipo local ingresó al campo de juego y golpeó por la espalda al atacante uruguayo Henry Gimenez.

El árbitro evaluó la situación con sus asistentes y determinó que no había garantías para seguir el partido y lo suspendió.

El encuentro se jugaba con acciones equilibradas y gran ritmo con dos equipos decididos a arrancar con una victoria en el torneo regional.

River Plate había comenzado mejor en los primeros minutos fiel a su sistema de juego ofensivo con tres delanteros, como le gusta a su entrenador Juan Ramón Carrasco, lo que complicó la salida del equipo boliviano.

Sin embargo, Blooming tuvo las mejores oportunidades de anotar, sobre todo en dos jugadas a los 29 y 45+1 minutos cuando el atacante argentino Hernán Boyero no pudo culminar dos ataques sorpresivos, el primero con un remate muy anunciado y suave y el segundo un cabezazo que se fue apenas desviado.

Pero River Plate fue más contundente en la ofensiva e implacable, porque no desperdició el inexplicable error del guardameta Gemio y anotó a los 61 minutos la única diana del partido, que un minuto más tarde fue suspendido tras la agresión de un hincha del cuadro local.

El agresor ingresó al campo de juego tras burlar a la policía para golpear por la espalda a Henry Giménez, agresión que fue la detonante para otros incidentes menores pero que obligó al juez peruano a suspender el encuentro a la espera de la decisión final de la Confederación Sudamericana.

Foto: El Deber