Cuevas, de 23 años y 67 del ranking mundial, había fracasado en los últimos dos años en pasar a la segunda vuelta del último Gran Slam del año. "Una alegría muy grande de haber pasado la primera ronda", manifestó Cuevas al terminar su partido.

El uruguayo conectó 11 aces con un servicio eficiente y consiguió 4 de 6 puntos de quiebre, mientras mantuvo su saque incólumne. "Estuve fino en la devolución durante todo el partido, y mi servicio trabajó muy bien, pero creo que la clave fue no haberle dejado jugar los puntos muy largos", añadió.

El mejor momento de Cuevas en un Gran Slam fue cuando ganó el título de dobles en el Roland Garros de 2008, de pareja con el peruano Luis Horna.

Ahora inició también con buen paso en dobles, al ganar el martes su partido junto al argentino Juan Ignacio Chela, contra la pareja argentina de Lucas Arnold y Leonardo Mayer. "Vamos a ver hasta donde llegamos en dobles, pero nos sentimos muy cómodos", expresó el salteño.

En partido por el pase a tercera instancia se medirá contra el austriaco Daniel Koellerer (62 ATP), vencedor del portugués Rui Machado 6-2, 6-4, 2-6, 6-2.

"A Daniel le conozco, hemos jugado dos veces en Challenger y le he ganado", dijo Cuevas.

"Fuera de la cancha nos llevamos muy bien, y creo que eso le impide poner el extra para ganarme. Ayer me vio y me saludó muy cálido, y le dije a mi novia: 'éste no debería saludarme si no quiere perder'", dijo Cuevas con una sonrisa de picardía en el rostro.

Cuevas dijo sentir todavía molestias en el hombro derecho, donde sufrió una lesión que le mantuvo inactivo hasta hace poco. "Me molesta un poco, pero hay que seguir para adelante", acotó, y añadió que después de este US Open jugará varios torneos en Europa.