Se terminaron los 90 minutos y otra vez el partido terminó sin goles (ante Italia por la fase de grupos también fue 0 a 0).

Descanso y relajación para enfrentar un decisivo alargue.

En el primer tiempo de la prórroga fue más Uruguay. Los dirigidos por Roland Marcenaro abrieron el marcador por intermedio de una gran jugada colectiva que culminó una de las grandes promesas que tiene este elenco juvenil celeste: Sebastián Gallegos. El volante uruguayo contó con la complicidad del arquero iraní, a quien se le escurrió la pelota.

En la segunda parte del tiempo extra llegó un exquisito pase para el 10 de Uruguay, que picó a espaldas de la zaga de Irán y definió por arriba del arquero.

El descuento llegó a segundos de finalizar el partido, pero a Irán no le dio para impedir el pasaje de la Celeste a cuartos de final.

Allí lo espera la selección española, que derrotó 4 a 1 a Burkina Faso y antes había clasificado invicta en su grupo (9 puntos).