"Lo confirmo: si no conseguimos transmitir tranquilidad, tengo que dejar que venga otro. Es lo que entiendo le falta al equipo, tranquilidad. Pero también sé que hoy no es el día para irse", aseguró Fossati tras la derrota de su equipo 2 a 0 ante el Caxias por el torneo Gaúcho.

"Se que el partido clave para nuestra continuidad en la Libertadores es el del miércoles. Ningún (dirigente) me puso plazos. La diferencia que encuentro en los últimos dos partidos es la confianza. El equipo ha perdido la tranquilidad y eso es preocupante", agregó.

Inter está cuarto en su grupo, en el que no está Gremio, a ocho puntos del líder, Caxias, y por debajo de San José y Pelotas.

En el torneo estadual clasifican cuatro de cada grupo a cuartos de final, pero se considera un fracaso que Inter y Gremio, los grandes de Río Grande del Sur, no lideren con luz sus grupos por enfrentar a equipos, en teoría, mucho más débiles.

"El Inter no deberá pasar por la vergüenza de despedir al técnico  en caso de una nueva derrota el miércoles, contra Cerro, en el Beira-Río. El propio entrenador renunciará", aseguró el portal Globo Esporte, en coincidencia con Gazeta Esportiva y el diario Zero Hora.

Según Globo, "Mientras Fossati daba la conferencia de prensa tras la derrota, el vicepresidente de fútbol del club, Fernando Carvalho, reunió a los jugadores en el vestuario y, a los gritos, les dijo que nadie va a derrumbar al equipo, (...) y pidió entrega total al grupo en el partido con los uruguayos".