Atlético Madrid llegó a Anfield Road con una exigua ventaja, producto del gol que anotó también Forlán en el estadio Vicente Calderón madrileño. La tarea de aguantar esa diferencia se preveía ardua, dado que Liverpool iba a procurar igualar la serie desde el primer instante.

Hasta casi finalizar el primer tiempo salió todo de maravilla para los españoles. Controlaron con eficacia los pocos embates profundos del rival, y como era de prever, casi no devolvió ataques. A los 25 minutos estuvo cerca Liverpool, cuando no menos de seis jugadores armaron un "tiki-tiki" a toda velocidad, pero la definición final resultó defectuosa. A los 44 no fallaron y Aquiliani consiguió la apertura con tiro esquinado desde le borde del área.

Igualados en la serie, iniciaron el complemento con la misma tesitura: Liverpool atacando y Atlético expectante. Sin embargo, el segundo tiempo transcurrió sin mayores sobresaltos para los arcos. Tan sólo sobre el final Liverpool apretó con riesgo de gol sobre la línea final a su rival.

Las emociones llegaron en la prórroga, porque cinco minutos de iniciado y Benayoun apuntó el 2-0 a favor de Liverpool, que significaba el pasaje a la final. Pero siete minutos luego, en jugada rápida por derecha que derivó en centro al área, apareció por el centro del área Diego Forlán que venció con toque corto al arquero y descontó para Atlético.

El marcador no se movió el resto del tiempo (donde pudo anotar nuevamente Atlético), y finalmente, los madrileños confirmaron su pasaje a la final que jugarán el 12 de mayo, ante Fulham inglés en la ciudad alemana de Hamburgo.

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