Puyol se estaba poniendo hielo en una rodilla cuando lo fueron a buscar a la ducha porque la Reina Sofía estaba en el vestuario para saludar a los jugadores.

Y Puyol encaró, pero ataviado únicamente con una toalla. Asó le extendió la mano a la Reina, entre las risas de sus compañeros, todavía con el uniforme seleccionado.

El video circula por internet y es parte de los más comentados en los foros de internet españoles, lo mismo que las polémicas entre catalanes y "españoles" por que la "Roja" tenga siete titulares del Barcelona.

Mientras, a Puyol prefiere hablar de la final y de su futuro. El central del Barcelona ya había adelantado en mayo pasado durante la presentación de un libro sobre la selección española que "seguro que sí, que será el último Mundial, no creo que vuelva como seleccionador".

El jueves, en conferencia de prensa, relativizó aquella declaración. "Lo que nos queda por delante es muy bonito y después ya habrá tiempo para valorar estas cosas", afirmó.

"Desde el primer día he dicho que la decisión no está tomada, que la tomaremos con el míster (Vicente del Bosque) y con (el director deportivo de la Real Federación Española de Fútbol, Fernando) Hierro, entonces, después de la final ya habrá un momento para hablar de esto", agregó el autor del tanto de la victoria sobre Alemania 1-0 en la semifinal disputa el miércoles en Durban.

Otro tema que, a esta altura parece ineludible en el Mundial, es hablar de los jueces y su protagonismo. "Seguro que él no va a ser protagonista y que lo va a hacer bien", dijo Puyol, sobre quien arbitrará la final, el inglés Howard Webb, el mismo de la derrota de España 1-0 ante Suiza, gol en offside incluido.

"Yo nunca hablo de los árbitros, creo que arbitrar es muy difícil y si está en la final de una Copa del Mundo es porque es bueno", afirmó Puyol.