Se registraron un par de sustos en la vuelta a los entrenamientos en la localidad sudafricana de Potchefstroom de la selección española, que comenzó a prepararse para la final mundialista de este domingo ante Holanda.

Los dirigidos por Vicente del Bosque se ejercitaron con mucha intensidad, lo que el volante Cesc Fábregas y el delantero suplente Juan Manuel Mata sufrieran golpes que finalmente no revistieron gravedad: en el caso de Fábregas, recibió una entrada del delantero Fernando Torres.

El diario deportivo As informó que la práctica no arrojó novedades, ya que sólo contó con la presencia de los suplentes y del arquero titular Iker Casillas, quien suele ser habitual en los entrenamientos del día después de los partidos.

Los jugadores trabajaron el aspecto físico y a continuación realizaron ejercicios con pelota, antes de finalizar disputando fútbol entre tres equipos.

Del Bosque aun no confirmó el equipo finalista, pero da la impresión de que no se dispone a realizar cambios: "Hemos mantenido un bloque de jugadores en estos seis partidos anteriores y no creo que haya muchos cambios", dijo en rueda de prensa.

Ante Alemania, ensayó una variante al sacar de los titulares a Torres y colocar en su lugar al delantero Pedro. De cara a la final, parece convencido a mantenerlo: "Estamos muy contentos del trabajo que hizo Pedro. Queríamos que más que defender, atacara a Lahm. Decidí contar con él desde que acabó el partido de Paraguay, buscando alternativas a los puntos fuertes de Alemania", apuntó.

El grupo entero volverá al trabajo el viernes con una sesión de gimnasio matinal, y por la tarde tendrán un entrenamiento a puertas cerradas antes de viajar el sábado hacía Johannesburgo, donde el domingo se jugará la final.