La mayor goleada en lo que va de las nueve ediciones del certamen continental eximen de mayores comentarios para describir dos expresiones futbolísticas absolutamente desiguales, entre un equipo sólido y arrollador, y otro mediocre y vulnerable.

Defensor salió a la cancha del Centenario con un gol traído desde el vestuario, que se materializó a través de un penal cometido por la defensa incaica a los 20 segundos y convertido al minuto de juego por intermedio de Diego De Souza.

Llamativamente desde ese instante, los dirigidos por Pablo Repetto dejaron consumir casi toda el primer tiempo sin que el categórico dominio de las acciones reflejara en el marcador el monólogo exhibido en campo de juego.

Recién a falta de un minuto para el cierre del período inicial el defensa Mario Risso (44) convirtió de cabeza el segundo gol violeta.

En el segundo acto en cambio, las diferencias se hicieron por demás evidentes y dieron paso a una catarata de goles desde el primer minuto de reanudadas las acciones, al 79 en el que Defensor se dio el lujo de quitar el pie del acelerador.

De Souza (46) anotó el segundo de su cosecha con un remate cruzado desde el vértice del área mayor que se desvió en el defensa Juan Matto.

Miguel Amado (47) le dio asimismo destino de red a un misil de pierna derecha ejecutado desde 35 metros. Un golazo.

Rodrigo Mora (57, con sutil toque corto y 67 -de penal-) y Adrián Luna (62 -de penal- y 79 de media tijera), se despacharon con sendos dobletes, mientras que el paraguayo Eduardo Aranda (76), también se dio el gusto de colocar la pelota en el arco peruano, con un remate sin ángulo contra el vertical.

De su lado Huancayo pagó demasiado caro la falta de rodaje internacional y terminó de rodillas esperando la finalización del partido.

El elenco peruano cruzó por primera vez la mitad de la cancha a los 13 minutos, en un tibio avance que se diluyó antes de pisar el área y ejecutó solo tres remates al arco en todo el partido, dos de ellos de tiro libre.

Para colmo, el árbitro brasileño Marcelo Henrique decretó las expulsiones del mediocampista paraguayo Blas López (39) y del defensa Javier Salazar (65)  por fuertes infracciones sobre jugadores violetas.

Al grito de "10", "10", "10" la hinchada de Defensor, pedía a sus jugadores por la décima conquista que no llegó. Quedó en 9.

El partido de vuelta se escenificará el próximo miércoles en la ciudad de Huancayo, situada a 3.250 metros sobre el nivel del mar y el ganador de la llave enfrentará en octavos de final al argentino Independiente, entre el 5 y el 21 de octubre.

Desde ya se puede decir que Defensor irá a pasear a Perú. Sólo resta saber si irán los titulares o un equipo alternativo.