La lista encabezada por Segovia derrotó en las elecciones de la ANFP por 28 votos contra 22 a la que impulsaba la frustrada reelección de Mayne-Nicholls, que gobierna desde hace cuatro años.

Horas antes de la votación, Bielsa advirtió que en ese escenario abandonaría su cargo: "No puedo ni voy a trabajar en común con el señor Segovia", disparó en una extensa conferencia de prensa realizada el miércoles.

Con Bielsa a la cabeza, Chile volvió a los mundiales tras dos ausencias (2002 y 2006). Su gestión y la Mayne-Nicholls contaban con un amplio respaldo popular, lo que generó protestas públicas una vez conocidos los resultados de las elecciones.

Segovia basó su candidatura en un importante apoyo de parte de los principales equipos chilenos –vinculados a influyentes grupos económicos- y del gobierno nacional, encabezado por Sebastián Piñera.

Cuando asuma en enero, su principal prioridad será buscarle un sustituto al técnico renunciante: el también argentino José Néstor Pekerman es una de las opciones. También se manejaron los nombres del chileno Manuel Pellegrini y del argentino Claudio Borghi, pero ambos están en actividad en España y Argentina, respectivamente.

La última aparición de Bielsa al frente de la selección chilena podría ser el miércoles 17, en ocasión del amistoso entre los trasandinos y Uruguay. Las próximas horas serán clave para definirlo.

El año que viene, Chile afrontará la Copa América que se desarrollará en Argentina y, a su término, el cominezo de las Eliminatorias previas al Mundial de Brasil que se celebrará en 2014.