(Emitido a las 8.36 hs.)


EMILIANO COTELO:
El 2011 fue un gran año en la carrera del Maestro Tabárez.

(Audio Ricardo Piñeyrúa)

"Estamos viviendo una época increíble, imposible de imaginarnos hace cinco o seis años cuando sufríamos para estar entre los cinco mejores de las eliminatorias y poder ir a un campeonato del mundo. Pero además Uruguay es campeón porque lucha, porque se esfuerza, porque es serio, porque es respetuoso, porque no pega; porque juega, porque tiene símbolos, tiene jugadores que se destacan por su lucha, jugadores que se destacan por su actitud, jugadores que se destacan por su inteligencia y por su juego. Que tiene todo y por eso es el mejor de América. Porque fue el mejor de América en el Campeonato del Mundo y hoy es el mejor de América en la Copa de América. ¿Qué será mañana? No me importa..."

(Fin del audio)

EC - Así, con esa euforia, el profe Ricardo Piñeyrúa comentaba aquí en El Espectador el resultado de la final de la Copa América que Uruguay ganó en Buenos Aires, tras vencer a Paraguay por 3 a 0.

Ese resultado, sumado al desempeño que la Celeste ha mostrado en los últimos años, le han valido a Tabárez varios reconocimientos internacionales que se acumularon en este verano.

¿Cómo asimila todas esas distinciones? ¿Cómo se está preparando para dirigir a la selección en los primeros Juegos Olímpicos que Uruguay jugará en fútbol en 84 años?

De ese tipo de temas vamos a conversar con el Maestro Óscar Washington Tabárez, pocas horas antes de que se suba al avión rumbo a Bucarest, para el partido amistoso que Uruguay jugará ante Rumania, el próximo miércoles.

¿Dónde lo encontramos? ¿Qué está haciendo?

ÓSCAR WASHINGTON TABÁREZ:
Tomando unos mates en casa, esperando la llamada de ustedes, y después alguna actividad que va a haber que hacer, siempre en función de toda la logística de la selección, que no termina en la actividad de la selección mayor. Estamos en esas cosas, en este momento.

EC - ¿A qué se refiere con "logística de la selección"?

OWT - Por ejemplo, concretamente, nos quedó un vacío en el Departamento de Ayuda Psicológica de la selección y estamos en el momento de hacer entrevistas para ver cómo cubrimos ese cargo. Y una de esas actividades me va a ocupar hoy a las 11 de la mañana. Más o menos de rutina, porque siempre hay algo que hacer, reuniones o a veces ir al complejo, cosa que a partir del 5 de marzo se va a hacer ya de rutina porque comenzamos las actividades de juveniles y con la selección Sub-23.

EC - Quiero empezar felicitándolo, porque este año 2012 comenzó con muy buenas noticias para usted. Después del triunfo en la Copa América 2011 y de los buenos resultados en los primeros partidos por las eliminatorias para el Mundial de Brasil, a fin de año fue elegido por periodistas de América y Europa, consultados por el diario El País, como mejor técnico de América; a principios de enero fue designado como el mejor seleccionador del mundo por la Federación Internacional de Historia y Estadística del Fútbol y a fines de enero la Unesco lo condecoró como Campeón de los Deportes. ¿Cómo se lleva con todos esos reconocimientos?

OWT – Bien. Le agradezco. Primero, tratando de agradecerlos mucho, pensando que la realidad ha superado todo lo que uno pudiera pensar algún año atrás. Pero tratando de no perder la visión general de lo que pensábamos cuando aún no habíamos llegado a la selección, de cómo fue el inicio de todo esto, sabiendo que hay muchísimas cosas para hacer, y sabiendo además que todos estos reconocimientos también son producto de las circunstancias, porque cuando uno planifica algo trata de hacer lo que considera más adecuado y de tener coherencia para imponerlo. Pero cuando hablamos de fútbol y de resultados deportivos, en esas circunstancias, empiezan a tallar otros factores. Fundamentalmente, los futbolistas. Y bueno, soy consciente de que esos reconocimientos hacia mi persona han venido fundamentalmente de esa circunstancia, por lo tanto los agradezco. Pero hablando en términos futbolísticos, no hay que creérsela demasiado porque, tanto si uno se queda demasiado en los halagos, en las cosas que pueda haber conseguido, como si se queda demasiado cuando le van mal las cosas lamentándose, se desconcentra. Y ese es el principal problema cuando uno encara una actividad de largo plazo.

EC - En particular, cuando recibió la distinción de Campeón de los Deportes en la sede de la Unesco, en París, la directora general de ese organismo dijo: "Tabárez, el Maestro, es uno de los grandes estrategas del fútbol moderno. Es un ejemplo de disciplina, perseverancia, espíritu, pero también de sensibilidad social, que lo ha llevado a construir un equipo importante". ¿Qué implica en términos prácticos ese titulo que le llegó de la Unesco?

OWT - Es algo especial. Esto no va en desmedro de todos los otros reconocimientos. Pero primero por lo que es la Unesco, que además tiene un tono afectivo para mí, porque fui muy lector de El Correo de la Unesco, sobre todo en mis épocas de maestro, que tenía clases grandes y era un gran material para recurrir, hacer actividades, sobre todo vinculadas a la geografía y a la historia. Y también reflexionaba en eso cuando esta señora estaba hablando en ese acto. Pero además porque la Unesco trabaja en aspectos que nosotros creemos que son muy importantes para nuestro país. Sobre todo de ver el deporte más allá de sus rasgos distintivos y de muchas actividades que tienen finalidades en sí mismas, también utilizarlo como vehículo de acción social para tratar de influir positivamente en el espectro social del mundo. Nosotros creemos en eso. Y además que se haya hecho un reconocimiento a esa parte de la actividad que uno quiere encarar en el fútbol es una distinción importante, y más allá de lo personal.

EC - ¿Lo compromete a algo? ¿Implica para usted tareas, actividades?

OWT - En cierto sentido ya antes de este acto habíamos tenido varias reuniones en la sede regional de Unesco en América del Sur, que está acá en Montevideo, con el señor Grandi, que es el presidente. En esas reuniones les hice ver mi proyecto para los juveniles, sobre todo los del interior del país, y se interesaron mucho. Quieren además que sea vehículo no solo de aplicación en Uruguay, sino en la región. Y ahí yo le encontraba un problema, porque todo lo que hicimos nosotros fue pensando en la realidad del Uruguay, fundamentalmente del fútbol uruguayo. Pero en vinculación con otras instituciones que están influyendo, como la Fundación Celeste, en reuniones con Fernando Castellanos, que es el gerente general de esa fundación –que es de los futbolistas, yo no soy integrante de la fundación, pero estoy muy atento a lo que hace. Y entre las muchas actividades que hace, hay una que me impactó y me pareció que podía servir también para cumplir con esa especie de requisito que me dijo la gente de la Unesco, que fuera una actividad de corte regional.

EC - ¿Cuál es?

OWT - Es un trabajo que están haciendo en convenio con el Consejo de Educación Primaria en las escuelas rurales del Uruguay. Ya han hecho experiencias en Colonia, en Salto, están por hacerlo en Rivera. Consiste en utilizar el deporte en esas escuelas, adonde por razones prácticas a veces se hace muy difícil llevar un profesor de educación física o un especialista en recreación, tratar de fomentar la actividad deportiva como excusa para el trabajo en valores y vincular también la importancia que tienen el deporte y la educación física como formación de la persona. Se han encontrado con estos problemas, pero me gustó mucho la creatividad que han tenido en cuanto a quién podía desarrollar esa actividad: recurren a los vecinos, a los propios padres, que usted sabe que en las escuelas rurales están muy cerca de las escuelas, pero para otro tipo de actividades que tienen que ver a veces con los locales o con la alimentación. Pero ahora se trataría de que algunas personas sean capacitadas para tener los conocimientos que les permitan realizar actividades con esos niños, que si no, no tendrían otras posibilidades de concretarlas. Está dentro de los objetivos que nosotros planteamos para el fútbol juvenil del interior y obviamente dentro de los objetivos que persigue la Unesco. Por lo que estamos en tren de implementarlo. Podría ser un proyecto muy interesante que conforme a todas las partes y que me permita a mí, ya con esta investidura que ya me han dado, hacer la primera actividad importante, que sería nada menos que utilizar al deporte simplemente como una excusa para influir positivamente en el espectro social.



EC - Usted y los jugadores de la selección han destacado de manera permanente que en este proceso, además de buscar buenos futbolistas, se ha procurado que el equipo esté integrado por buenas personas. Y en ese sentido se ha hecho un trabajo importante para que los deportistas tomen conciencia de su comportamiento, dentro y fuera de la cancha.

Por eso me interesa –y no solo a mí, varios oyentes también lo han planteado– saber cómo analiza lo que ocurrió últimamente con Luis Suárez, que es una de las estrellas de la Celeste. Especialmente, lo que se dio en la previa del partido Liverpool-Manchester United, cuando Suárez se enfrentó por primera vez a Patrick Evra después de las fechas de suspensión que había tenido que pasar por la denuncia de Evra, por aquellos insultos que habrían tenido contenido racista. Suárez no le dio la mano a Evra y eso lo colocó en medio de una nueva polémica, una polémica terrible, desgastante. Si usted hubiera sido el director técnico de ese partido, ¿cómo habría manejado la situación que le tocaba vivir a Suárez? ¿Qué conducta le habría marcado?

OWT - Usted sabe que esta es la primera entrevista que doy en estos tiempos, y sabía que esa era la sellada.

EC - Era cantada, ¿no?

OWT - Seguro. Lo he conversado con mis compañeros del cuerpo técnico, adelantándoles, no es lavarme las manos ni comprometerme, pero yo soy el técnico de la selección de Uruguay y todo lo que haga respecto de Luis Suárez tiene que ver con dos áreas fundamentales. Primero, la persona de él, de la que no me cabe ni la más mínima duda en cuanto a los valores que tiene y en cuanto a lo que es. Y después, Suárez como integrante de la selección de Uruguay, cómo puede influir en el futuro todo esto que ha pasado. Y esos quizás serán los dos temas de conversación que voy a tener con Luis ahora, aparte de los que tengo con todos.

EC - ¿No ha hablado todavía con él?

OWT - No, directamente no. Y ex profeso.

EC - Pensé que tal vez habían charlado por teléfono, por ejemplo.

OWT - No, no. Obviamente, le llegaron mis mensajes, pero no me pareció que aportase nada ni a la selección ni a mi relación con Luis salir a hablar públicamente, Y tomar partido en cosas que a veces están muy vinculadas a lo personal. Yo me cuido mucho, mucho, de eso. Inclusive, no sé ni los detalles, todo lo que sé es lo que saben todos por terceros, por los medios, o por alguien que pueda dar una versión. Lo único que me interesa es Luis Suárez y la selección de Uruguay, no me interesan ni otros futbolistas que estuvieran implicados, ni entrenadores, ni instituciones, ni culturas deportivas. No es que no me interesa: no me interesa hablarlo públicamente. Porque lo único que puedo hacer, posiblemente, sea equivocarme, y me cuido mucho de eso, más allá de lo que puedan pensar, que pueda haber una falta de compromiso.

EC - A usted podría haberle tocado perfectamente una situación como esa con la selección o con otro equipo. ¿Qué le habría marcado al jugador de fútbol sobre saludar o no saludar concretamente, sobre dar la mano o no dar la mano?

OWT - No, yo reconozco su habilidad, pero indirectamente estaría aportándole lo mismo. Yo no hablo sobre situaciones hipotéticas, si me llega esa situación haré como hago siempre que encaro situaciones, pero a un nivel de privacidad y de respeto a la persona y al profesional. Por otra parte, esto también es parte de todo eso que hace un rato usted elogiaba, la manera de ser de esta selección.

EC - Por eso venía la pregunta también.

OWT - Tratamos de hablar muchas cosas, y como cualquier grupo a veces también está la crítica o la reconvención, no es todo color de rosa y decir vamos a hacer esto y lo hacemos. Siempre va a haber obstáculos, pero siempre tratamos de aportar a la persona y que las cosas se hagan por convicción, porque si no, no tendría sentido. Sería facilísimo, si no, montar una organización en que se dan determinadas órdenes y todos los demás las cumplen. No creo en ese tipo de organizaciones, estoy más para la persuasión, el convencimiento, y sobre todo cuando después de un tiempo se han establecido muchos vínculos personales con los jugadores de la selección, que uno tiene que respetar. Porque así como ustedes piensan qué haría, yo también me puse a pensar qué haría si fuera Suárez. Y no sé lo que haría, porque tendría que vivir las mismas circunstancias que vivió él, y como eso es imposible prefiero no opinar. Y sobre el hecho concreto de no darle la mano, le puedo decir que hay algunas a las que yo no les daría nunca más la mano, y no me considero una mala persona. Entonces es muy difícil, muy difícil opinar cuando están involucradas tantas cosas, tantos aspectos, sobre todo los personales, los sentimentales y emocionales. Más allá de que después eso se pueda hablar en función de la relación personal. Dar una opinión, pero siempre a un nivel que no sea público.

EC - Usted dijo recién "hay personas a las que no les daría nunca la mano". Pero acá estamos hablando de una ceremonia muy particular, de fairplay, que se desarrolla antes de un partido.

OWT - Sí, pero usted también habrá visto que a raíz de esto empezaron a buscar antecedentes que hacen que esta no haya sido una situación inédita. Y aparte este era un caso muy especial, pero muy pocas veces se controla, salvo en un Mundial, el apretón de manos de todos los futbolistas. Generalmente se hace una imagen, una toma, y no se va al detalle.

EC - Usted decía que va a hablar esto con Suárez personalmente, mano a mano, que prefiere no hacer comentarios públicos. Pero dijo al pasar que lo que a usted lo preocupa, lo que tiene en cuenta es Luis Suárez como jugador de la selección, etcétera. En ese sentido, todo lo que ha ocurrido en torno a Suárez, esto de darle la mano o no a Evra y una cantidad de cosas más en los últimos tiempos, ¿a usted lo inquieta, le parece que puede enredar un poco el desempeño o la imagen de Suárez en el particular de la selección?

OWT - Es una posibilidad, y siempre que hay algo que sea posible hay que prepararse para esa eventualidad. No quiero andar cazando fantasmas ni nada por el estilo, pero es probable. De muchos temas ya habíamos hablado con Luis. Por ejemplo, para decirle una cosa que es de la intimidad de la selección pero que a manera de ejemplo me parece más ilustrativa que muchas palabras, en la final de la Copa América en el intervalo tuvimos que hablar con varios jugadores porque íbamos ganando 2 a 0 y estaban pensando más en el árbitro que en el partido. Ahí le hicimos ver a Suárez qué podía sentir un árbitro cuando un jugador le muestra la mano como diciendo "sacá tarjeta", que significaba poner en evidencia. Esas cosas se hablaron, y no es solo Luis, son muchos jugadores de la selección y de otros lados que a veces tienen eso. Nosotros tratamos de hacer ver nuestro punto de vista. Pero esto va a ser una realidad solo el día que Suárez no solo se convenza, porque está convencido, sino que pueda dominar su manera de sentir, su manera de expresarse en el campo.

Pero ahora esos aspectos, el del ejemplo, quizás, no lo sé, puedan tener otro significado porque esto ha tomado notoriedad mundial y alrededor de Luis siempre va a haber adversarios, va a haber público, va a haber árbitros, entonces tenemos que hablar de las cosas convenientes. Seguro, ese va a ser el temario, las cosas que tiene que hacer, pero obviamente eso va a quedar en el ámbito privado, lo que voy a hablar con él.

EC - Eso concretamente, que Suárez controle esa tendencia a protestar ante los jueces, usted dice que ahora va a ser mirado con lupa.

OWT - No sé, ya en Inglaterra pasa eso. Y le he visto mejoras en eso, porque se habla mucho de la dada de mano de Evra. Pero he visto a Luis estos partidos que han seguido a todo esto y he visto progresos en su actitud. De eso no se ha hablado demasiado porque es una cosa positiva.

EC - A propósito, ¿puede quedar cuestionada la participación de Suárez en la selección en los Juegos Olímpicos, porque van a tener lugar justamente en Inglaterra?

OWT - No sé, eso ahora en este momento lo veo a nivel de disparate, porque sería por ejemplo decir que nosotros no podemos hacer nada en ese sentido, o que Luis está condenado por lo que hizo. O sea cosas que a mí no me pasan por la mente.

EC - Se lo pregunto porque es una especulación que ha corrido.

OWT - Sí, sí, ya lo sé, pero acá hay especialistas en drama. Nené Cascallar no era la única.



EC - Le cuento algunos de los mensajes que llegan de la audiencia.

Teresa: "Me emociona escuchar a Tabárez, sobre todo cuando mi padre, hoy de 81 años, decía a los jugadores acá en Rodó, Soriano: ‘Jueguen fútbol y verán que el árbitro no existe’. Gracias por todo, por director técnico y por persona. Gracias por ser un referente con cariño".



EC - ¿Algún breve comentario sobre ese mensaje?

OWT - A mí es lo que me emociona, porque generalmente es lo que se quiere, dar una especie de salto cualitativo a la gran cultura deportiva, y sobre todo futbolística, que hay en nuestro país. Estamos totalmente de acuerdo.

Volviendo a lo de Luis Suárez, ahora estaba reflexionando que fue el jugador más golpeado, o el que recibió más faltas en la última Copa América. Eso lo dicen las estadísticas de la propia competición. Y él no puede hacer mucho para que esta situación cambie porque no depende solo de él, depende del árbitro del partido, que es el que debe proteger a los futbolistas usando el reglamento. Pero sí puede hacer mucho para que esto no se agrave o para no favorecerlo. Para agregar un poquito a lo que hablábamos anteriormente de los temas que sí podemos hablar con Luis para el futuro.

EC - Sí, Suárez sabe perfectamente bien que su forma endemoniada de jugar provoca muchas veces la falta, el foul.

OWT - Exactamente, él juega mucho en situación de uno contra uno, es un jugador que pierde muchas pelotas, pero la intención es ponerla detrás del rival, y cuando lo logra crea una situación muy favorable. Y bueno, generalmente se producen faltas, y algunas no tan necesarias, porque a la hora de limitar a un rival importante el jugador utiliza los recursos hasta donde se lo permiten. Entonces todas esas situaciones se tienen que analizar y ver cuáles son la actitud y el comportamiento más convenientes para no agravarlas.

EC - En los últimos años se ha analizado mucho cuáles son las claves de la era Tabárez. Algo ya hemos hablado con usted en alguna entrevista anterior aquí en En Perspectiva, pero le agrego hoy un par de preguntas más. Una, entre los jugadores de su proceso como seleccionador, ¿hay algunos que usted mantiene porque aportan más desde lo moral o desde lo anímico que desde lo estrictamente futbolístico?

OWT - Es muy difícil hacer esa línea divisoria, porque en primer lugar, por definición y porque es así en estas circunstancias, un futbolista está en la selección porque tiene capacidad futbolística para hacerlo. Después cuando ha tenido su oportunidad y a criterio nuestro ha ganado un espacio para ser considerado, lo mantiene y ha mostrado muchas dotes respecto del espíritu de equipo y a veces hasta de liderazgo, va a tener su espacio hasta que uno no vea que hay soluciones mejores. Entonces no es tan así, todo tiene que ver en la permanencia de un futbolista en la selección, pero nadie está acá porque se haya portado bien o porque sea buen tipo solamente.

EC - Se lo pregunto a propósito de comentarios que todos hemos escuchado sobre algunos jugadores, por mencionar uno, el Loco Abreu, que siempre es suplente y que cuando entra lo hace por muy pocos minutos.

OWT - Yo considero, ahora hablando concretamente de fútbol, que Abreu es un delantero todavía muy vigente para ciertas circunstancias del juego y ciertos momentos de los partidos, sobre todo cuando hay mucha generación de fútbol por los espacios laterales y desde ahí se pueden hacer envíos para la definición de los que están dentro del área. En eso Abreu es un especialista, creo que tiene vigencia, y lo que está haciendo en el fútbol brasileño da pie a lo que estoy diciendo. En muchos momentos no hemos mostrado esa capacidad de propuesta, de dominar el terreno mediante una gran posesión de pelota, quizás apelamos a otra manera de jugar y de llegar a la concreción. Sobre todo a salir rápido, jugar velozmente, reconvertirnos permanentemente de defensa a ataque y de ataque a defensa. Y para algunas de esas circunstancias, en nuestra modesta manera de ver las cosas, puede haber otras opciones mejores, por eso muchas veces queda relegado y no tiene los minutos: Pero en una eliminatoria, mientras mantenga esas condiciones que está mostrando en este momento en el fútbol brasileño, tiene su vigencia y es una de las opciones que tenemos. Más allá de que también es muy importante lo que ha hecho Abreu desde el 2006 en cuanto a la conformación de todo esto, y además por su gran claridad y su gran capacidad de expresión, de ser un defensor grande de todo este proceso de trabajo.

EC - Otro tema importante y delicado que a usted le toca ir enfrentando en los próximos meses, teniendo en cuenta que este proceso tiene sus años ya: ¿cómo resuelve el momento en que termina la presencia de un jugador en esta selección que dirige?

OWT - No sé si hay un momento. La que va a marcar las señales de eso es la propia realidad, que la tiene que observar el entrenador, pero también el propio futbolista. Eso se da y no hay fórmula. Ayer yo estaba mirando el partido del Inter con el Olympique de Marsella y vi jugar a Zanetti y quedé asombrado. No solo porque tiene 38 años, no solo por lo que juega, sino por su capacidad física, su despliegue, su liderazgo, ha batido todos los récords en el fútbol italiano. Usted me dirá: ¿se puede jugar hasta los 38? Zanetti sí; hay otros que a los 32 años ya tienen problemas. Es muy individual eso, inclusive ahora hay cosas vinculadas a la preparación del futbolista que alargan la vida útil. El Milan tiene un laboratorio, el Lab Milan, que trabaja sobre estos aspectos, no es casualidad que en el Milan haya jugadores que han jugado hasta los 40 años, Maldini, Costacurta, Albertini, el otro día reapareció Inzaghi, que creo que tiene 35 años y viene de una lesión grave. O sea, hay que ver caso por caso, y además lo que le decía en la anterior pregunta: si no aparece otra opción mejor, porque es una obligación del entrenador tratar de hacer lo mejor para la potencialidad del equipo.



EC - Usted viaja a Bucarest para terminar de preparar el partido amistoso del miércoles Uruguay-Rumania. ¿Qué utilidad le parece que tendrá ese partido para la selección?

OWT - Viajamos el domingo. La utilidad es la de todos los partidos de fecha FIFA que nos dan la oportunidad de evaluarnos, de estar en contacto nuevamente. Es una cosa muy grata cada reencuentro, porque a veces, como en esta oportunidad, se logra después de unos meses de no vernos. Vamos a informar mucho sobre lo que viene, sobre lo que vamos a hacer y, como en todo partido de fecha FIFA, apuntar a los mismos objetivos: rendimiento, resultado y comportamiento. Los tengo cansados a los futbolistas con eso, ya hasta se ríen con este machaque, pero eso es lo que vamos a buscar. En muchísimos de los partidos que hemos disputado lo hemos conseguido, y sobre todo el último de ellos es el más importante porque también hay que defender una imagen de que tratamos de estar a la altura de lo que se espera de un espectáculo profesional. Conseguimos el título de Campeón de América, pero también, y para mí fue importante, ganamos el fairplay en ese mismo torneo.

EC - ¿Para usted pesa en este partido de la semana que viene esto de que puede llegar a batir un récord? Veía hoy en el suplemento Ovación de El País que el Maestro Tabárez está a un empate de igualar la marca de Juan Carlos Corazzo, en un invicto que lleva ya más de 42 años sin que nadie lo rompa. Entre 1967 y 1968, la selección uruguaya que dirigía Juan Carlos Corazzo se mantuvo 14 encuentros sin conocer la derrota, siendo hasta el presente el mejor guarismo que registra el seleccionado". Aquel redord puede repetirse si el miércoles Uruguay gana o empata; ¿entonces?

OWT - No lo sabía, es un dato estadístico. Sería muy importante conseguir un resultado positivo, porque uno ve que en el fútbol nada es eterno, nada es permanente. ¿Quién podía decir hace tres mees que el Barcelona podía ir a siete puntos del Real Madrid en la Liga? Son cosas que suceden. O yo no me imaginaba antes de que se jugara el resultado que se dio en el partido de Peñarol. El fútbol a veces lo teñimos con la pasión, con el drama que le damos, con la ansiedad, con la inmediatez que queremos para todo. Pero no es fácil, por más que uno planifique y cuide los detalles, ganar un partido en este nivel de paridad que hay en el fútbol mundial, en este momento.

Además, otra cosa que me preocupa es que el único partido que perdimos en el 2011, si no me equivoco, fue en Estonia, y con una temperatura que no sé qué punto de comparación puede tener con la de Rumania, porque he leído que la salida del Danubio en el mar Negro está congelada todavía. Cada vez que se va a jugar de visitante uno se enfrenta a esas cosas. Pero también hay cierta tranquilidad en el sentido de que sabemos lo que tenemos entre manos, cuál va a ser la actitud que vamos a proponer y lo que vamos a lograr. Así que vamos a ver, para mí es muy importante lo del resultado, porque también tiene que ver mucho con el prestigio que en este momento creo que hemos ganado, que hace que muchos ojos miren hacia acá y que también pueda haber un aumento de la dificultad. Por los datos que hemos tenido, porque nos hemos informado de la selección de Rumania, de los partidos que ha jugado, pero además de cómo encaran este partido, según parte del informe que me han mandado se lo están tomando muy en serio. Ahora no es como en el 2006, que capaz que no agregaba mucho ganarle un partido a Uruguay, ahora trae prestigio, por lo menos para una selección que en el ranking de FIFA está en el lugar 56 y que tiene mucha historia, como la selección de Rumania. Nada va a ser fácil. Vamos con esa expectativa, pero como siempre decimos, no tenemos la seguridad de poder hacerlo, vamos a tratar de prepararnos bien en la medida de lo posible y el poco tiempo que hay, y hacer un partido a la altura de los antecedentes.



EC - Desde la audiencia hacen notar que esta posibilidad de que el miércoles, en caso de que Uruguay empate o gane a Rumania, esta selección de Tabárez alcance el récord de 14 partidos sin perder, que hasta ahora tiene la selección del director técnico Juan Carlos Corazzo en los años 1967 y 1968, tiene un condimento especial, porque en esta selección juega Diego Forlán, nieto de Corazzo.



EC - La semana pasada se dio a conocer la lista de preseleccionados para fútbol en los Juegos Olímpicos de Londres. Se puso en marcha ese proceso, que va a ser uno de los hitos de su trabajo en este año que empieza. ¿Con qué expectativas encara ese desafío, que implica el regreso de Uruguay al fútbol de los Juegos Olímpicos después de 84 años?

OWT - Si usted me permite, me tomo un minuto para explicar cuál es el panorama que tenemos para encarar esta circunstancia de tener que disputar los Juegos Olímpicos de Londes (que comienzan a fines de Julio). La edad reglamentaria para los Juegos Olímpicos es la sub-23, es la edad ideal para tener una selección estable a nivel local, sobre todo para los países dependientes. Dicho sea de paso, los países de la elite del fútbol, que están en Europa central, tienen sus selecciones sub-21, y la primacía de su selecciones se debe también a que muchos futbolistas vienen de esos procesos. Pero acá en América del Sur y en otros continentes se han eliminado las competiciones preolímpicas, esos torneos que se hacían para clasificar a los Juegos Olímpicos, en los que Uruguay ganó un derecho a clasificación que después no utilizó, no se hacen más. Han inventado de manera administrativa la clasificación mediante un torneo sub-20.

Otra cosa, la actividad olímpica no está incluida en el calendario de FIFA, lo que no da garantías de contar con los futbolistas para esa competición, no solo los posibles tres mayores que vayan, ninguno. Si Fénix le dice a un jugador que queremos llevar "no", será no. Todo eso hay que considerarlo respecto de cómo cumplir con las exigencias reglamentarias del Comité Olímpico, que son diferentes de las del Mundial, por ejemplo, en que prácticamente cinco meses antes de la competición hay ya una lista de futbolistas de la cual tienen que salir necesariamente los 18 que integren el plantel y los cuatro que van a estar en stand by por si hay algún problema de lesión grave que haga sustituir a algún futbolista.

EC - Por eso usted ha planteado una lista tan larga, son más de 70.

OWT - Exactamente, por eso, pero además por otras cosas. No solo porque no sé, hablando claro, qué jugadores nos van a dar y cuáles no; usted habrá visto que en la lista hay jugadores que son de edad de sub-20 y otros que no están jugando en primera división, pero en cinco meses puede pasar cualquier cosa. Entonces uno tiene que ser lo más amplio posible sin caer en la exageración. Por eso la lista tan amplia. Y respecto de la posibilidad de los jugadores mayores, establecimos el criterio de que tienen que ser futbolistas de selección mayor, porque me parece que ahí están los mejores candidatos para elegir los tres posibles refuerzos para la selección sub-23.

EC - Todo seleccionador puede elegir en los Juegos Olímpicos tres jugadores que sean mayores de 23.

OWT - Exactamente, es una posibilidad.

EC - ¿Cuáles son los criterios para estos nombres?

OWT - Reforzar aquellas zonas del equipo que nos merezcan más necesidad de ser cubiertas o de jugadores que puedan influir mucho en la integración de cualquier equipo, que los tenemos. Pero como le digo, si uno piensa en tres y cuando llega el momento dos de esos no van a estar, hay que pensar en otros. Entonces hay que ir manejándose con un espectro muy amplio, establecer los contactos –que ya se empezaron a establecer– con los clubes desde antes de dar la lista, sobre todo con aquellos futbolistas de edad sub-23 que están en el exterior, ese tipo de contactos ya apareció. Quizás nos favorezca el hecho de que los Juegos Olímpicos se van a disputar en el período vacacional de los equipos. Pero muchos equipos, sobre todo los muy organizados, son muy celosos de cumplir con todas las etapas, los períodos de descanso y de pretemporada de los futbolistas. Entonces no hay más remedio que hacer la gestión. Hemos hecho una reserva y enseguida empiezan a llover los pedidos de clubes: "Este jugador no porque juega tal día, juega tal otro", ahí nos hacemos fuertes porque nos ampara el reglamento y tenemos que defender nuestros intereses. Si podemos acceder, lo hacemos. Pero no por motivos un poco banales. En este caso es complicado desde el punto de vista no solo de formar las listas, sino después, para entrenar. Lo ideal sería entrenar varios meses con una selección, pero eso es imposible, y nosotros tenemos que hacer una observación previa de los futbolistas, sobre todo los del medio local, para después definir, después de jugar las eliminatorias en junio, el período de preparación específica para los Juegos, y ahí tratar de prepararnos lo mejor posible.

EC - En esa lista de reserva hay varios jugadores sub-23 que han integrado la selección mayor. Por ejemplo Sebastián Coates, Gastón Ramírez, Nicolás Lodeiro, Abel Hernández; ¿alguno más?

OWT - No, son esos cuatro, por ahora.

EC - ¿Es un hecho entonces que ellos van a estar en Londres, ellos sí van a estar en Londres?

OWT - Uno se va haciendo una idea de cómo podría armar un equipo y cómo podría armar un plantel. Que dicho sea de paso, para mi gusto es muy escaso en cuanto al número. Son decisiones del Comité Olímpico Internacional y uno no las puede cuestionar demasiado. Pero no es que estén seguros, es que son jugadores que ya cumplen con el requisito de la edad y tienen un nivel de experiencia deportiva importante. Por lo menos se podría decir que son grandes candidatos a estar.

EC - Y en la otra punta, varios de los reservados son juveniles que el año pasado disputaron la final del Mundial Sub-17 en México. ¿Usted está pensando en que algunos de ellos efectivamente queden en la lista final, o son jugadores que se los cita como capital de futuro? ¿Qué es eso?

OWT - Eso sí, pero fundamentalmente por las condiciones. Yo qué sé, le digo un nombre al tirar, el primero que me vino a la mente, Rodrigo Aguirre, que juega en Liverpool, ¿y si empieza a meter dos goles en cada fin de semana o se afirma? ¿O Gonzalo Bueno en Nacional? Uno no puede andar adivinando, son jugadores que tienen edad para la sub-20 y me parece que esa es su selección, pero además entran dentro de los perfiles teóricos que marcamos para los futbolistas de selección, les vemos esas características; lo que no sabemos es qué es lo que pueden hacer de aquí a que se les dé la oportunidad. Eso va a depender mucho de la actuación de esos futbolistas en el club, sobre todo el hecho primario y mínimo de jugar partidos, porque vamos a ir a encarar una competición internacional, que tiene su nivel de exigencia, y el mínimo que tendría que haber es que jueguen. No es una condición sine qua non, pero es importante que jueguen en primera división acá en el medio local.

EC - En definitiva, por lo que usted cuenta, es un trabajo complejo este de la selección uruguaya para los Juegos Olímpicos de Londres.

OWT - Muy difícil, sí.

EC - ¿Qué espera entonces? ¿Con qué expectativas se plantea esta línea que ahora empieza a encarar?

OWT - Como hacemos siempre, tratar de preparar bien, llevar un equipo que pueda ser competitivo. Y después tratar de ir partido por partido, de conseguir el resultado que querremos. Sabemos que va a ser algo difícil, acá no se ha analizado demasiado el nivel de los equipos clasificados. Pero hay muy buenos equipos, que tienen como objetivo deportivo conseguir la medalla de oro, así como objetivo único. Es el caso de Brasil, que nunca la ha conseguido y que viene con una selección sub-20 campeona, con jugadores que juegan en primera división, son integrantes de la selección mayor una gran cantidad de ellos.

EC - Uruguay la consiguió dos veces y nunca más, nunca más participó.

OWT - Ahí está, entonces también hay un sustrato histórico en todo esto y una vinculación afectiva que tiene que ver con la historia del fútbol uruguayo, que hace que nosotros, sin adelantarnos a la realidad, también queramos ir con la idea de conseguir una medalla.

EC - ¿Ese es un objetivo?

OWT - Claro, claro, porque tiene que ser así. Lo anterior era para hacer ver el grado de dificultad que va a tener esta empresa.

EC - Cuando usted dice que el objetivo es conseguir una medalla, es por lo menos el tercer puesto.

OWT - Yo ya le digo terminantemente: no estoy de acuerdo con aquello de vamos a conseguir la medalla de oro como si fuera... estamos cayendo en vicios que tuvimos en otra época y nos trajeron malos resultados. Yo apuesto por la humildad, por el perfil bajo, y por ver las cosas después que suceden, no antes. Y además sería un signo de vanidad desatender todas esas realidades que no se agotan en el ejemplo de Brasil que le puse, hay muchas otras selecciones. No va a ser nada fácil. Pero por otra parte, nos parece que es el aspecto lindo de este desafío.

EC - La medalla de bronce sí es un objetivo, por lo menos.

OWT - Así como en la Copa América dijimos que el objetivo era el cuarto puesto, lo dijimos, lo volveríamos a decir para la copa que viene, porque Uruguay en cuatro ediciones anteriores había pasado la fase, entonces ese era el objetivo mínimo. Tampoco pensábamos que era un paseo de salud llegar a ese objetivo mínimo, que es lo que la gente a veces no capta bien o no discierne demasiado, y parece que solo fuera plantearse un objetivo, meter pata como se dice en el fútbol, y ya está. No es tan sencillo, y estos ejemplos de que hablábamos, del Barcelona, de la derrota de Peñarol, un montón de cosas, dan la pauta de que el fútbol es muy veleidoso y siempre tiene una sorpresa. Entonces, no es ser timorato, al contrario, es ir a buscar lo que uno quiere, pero sin hablar antes y sin andar condicionándose por las palabras.

EC - Suerte el miércoles que viene frente a Rumania.

OWT - Ha sido un gusto.



Transcripción: María Lila Ltaif