Según supo El Espectador, este jueves la policía realizó la revisión al Parque Viera, y confirmó el estadio está en condiciones para albergar el partido entre Wanderers y Nacional.  

La condición impuesta por la Policía fue no habilitar la Tribuna Barrios para el encuentro, ya que las obras aún no están terminadas.

Por su parte, los tricolores no están contentos con la situación. Tras conocerse la localía, la directiva de Nacional reclamó un incumplimiento en el reglamento.

Según las reglas, Nacional y Peñarol podrán jugar en canchas que tengan 5000 asientos disponibles para público, por lo que Nacional alega que al estar inhabilitada una de las tribunas, no se alcanzaría dicho número.

La Mesa Ejecutiva analizó el reclamo tricolor, pero decidió finalmente que el encuentro será en el Viera.