En las tribunas de Maracaná no habrá torsos desnudos ni hinchas parados desde que el torneo local se inicie y Fluminense sea local en la mítica cancha. Esta decisión se debe a que el consorcio privado que administra el estadio prepara un manual sobre conductas (las cuales serán removidas para el Mundial 2014): "Vamos a conversar con los clubes para el cambio de hábitos, me refiero a bambús (como astas de banderas), tambores, o ver los juegos de pie", dijo Joao Borba, presidente del consorcio Maracana S.A., que recibió la concesión del estadio por 35 años, citado por el diario Extra.

Pese a las nuevas reglas, "el Fluminense está orgulloso y la nación 'tricolor' está orgullosa de que estemos regresando a casa", celebró su presidente Peter Siemsen, citado en el sitio web del club.

El contrato firmado contempla que Fluminense se queda con la renta del 56,6% de los asientos (los situados tras los arcos y los corner) y esté exento del pago de alquiler. El club podrá instalar una tienda de productos oficiales. El consorcio privado ofreció un contrato similar a Flamengo, el cual rechazó la idea y está en negociaciones para un acuerdo mejor.

Fuente: EFE.