"Los últimos días han sido extremadamente difíciles", escribió Phelps.

"Nadar es una parte fundamental de mi vida, pero en este momento tengo que centrarme en mí. Me voy a tomar un tiempo [lejos de la piscina] para entrar en un programa que me proporcionará la ayuda que necesito para entenderme a mí mismo", sostuvo.

"Reconozco que este no es mi primer error de juicio, y estoy extremadamente decepcionado conmigo mismo", agregó.

La noche del martes, cuando fue detenido, el deportista estadounidense, de 29 años, tenía un nivel de alcohol en su sangre de 0,14%, por encima del límite del 0,08% del Estado de Maryland, en la costa atlántica de Estados Unidos.

De acuerdo a los investigadores, Phelps, cruzó con su vehículo la línea continúa que delimita los carriles opuestos en un túnel a una velocidad excesiva.

El nadador circulaba con su todoterreno al doble de la velocidad autorizada por la legislación local (135 km/h en una zona en la que el límite es de 72). En el momento de su detención, Phelps "fue incapaz de superar de manera satisfactoria una serie de pruebas que permitieran garantizar su sobriedad", según especifica la policía, que a su vez precisa que el nadador "cooperó a lo largo del proceso".

Phelps ya fue detenido en 2004 en el estado de Maryland por conducir ebrio cuando cumplió 19 años. Se declaró entonces culpable a cambio de un período de 18 meses de libertad condicional.