Por José Frugoni y Guillermo Bueno, de Espectador.com

¿Cuánto sabemos los uruguayos de Fórmula E? Alain Prost, a sus 59 años, le contó a Espectador.com cómo son las carreras de autos eléctricos. Para empezar, "no se puede comparar en nada con la Fórmula 1. Estas carreras recién comienzan y es algo completamente nuevo", reveló el tetracampeón desde París, ciudad desde donde dirige al equipo e.dams-Renault.

La nueva apuesta de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) son las carreras de coches eléctricos. Diez equipos con dos pilotos y cuatro autos cada uno compiten por circuitos urbanos de las principales ciudades del mundo. Punta del Este es uno de las urbes elegidas. "Estuve allí hace siete años con Niki Lauda. Esa primera vez la encontré muy hermosa", contó el galo, habitué de las carreras.

Las competiciones de Fórmula E se celebran en un día, el sábado. Todo comienza con entrenamientos libres. Luego, se corre la clasificación. Para eso, se dividen en cuatro grupos de cinco pilotos buscando la "pole". El mejor tiempo comandará la salida.

En la hora que aproximadamente dura la carrera, todos los pilotos están obligados a realizar una parada en boxes para cambiar de coche.

"En este nuevo campeonato todos los autos son iguales. Renault los fabrica y apuesta por la integración de la ingeniería de los vehículos. Estamos desarrollando una tecnología que será útil para toda la industria del automóvil", agrega Prost.

Formula E en Punta del Este

Los conductores del equipo que lidera son Nicolas Prost, su hijo, y Sábastian Buemi, un suizo expiloto de Fórmula 1. "Tenemos alrededor de 30 personas trabajando en el equipo durante las carreras. Otra unidad trabaja especialmente para el desarrollo de estos coches", completó.

Los autos de la Fórmula E alcanzan una velocidad máxima de alrededor de 240 kilómetros por hora, generan la mitad del ruido que producen los monoplazas con motores de gasolina y no emiten gases contaminantes.

Vettel, Alonso… y el mítico Senna

Mientras que la temporada "eléctrica" acaba de comenzar, la de Fórmula 1 se cerró con un dominio abrumador de la escudería alemana Mercedes Benz. Quizás la única atracción, en un año dominado por "las flechas de plata", fueron los pases de pilotos entre escuderías.

Sin dudas, los dos más importantes fueron los de Sebastian Vettel a Ferrari y Fernando Alonso a McLaren. Prost piloteó para italianos e ingleses y tiene claro qué va a pasar en los próximos meses con ambos pilotos.

"La llegada de Vettel a Ferrari va a ser bueno para él porque necesita un nuevo desafío después de los títulos ganados con Renault". Sin embargo, a pesar de valorar positivamente la llegada del talento de Heppenheim a Maranello, cree que es muy difícil que sea campeón del mundo en 2015: "Seguro será competitivo, pero le va a ser muy difícil ganar el campeonato en el primer año. Será una gran ayuda para que el equipo se vuelva mejor, pero ser competitivo en otra estructura diferente le llevará un poco más de tiempo". 

Fernando Alonso estuvo cinco años en Ferrari y acumuló tres subcampeonatos mundiales, 1.186 puntos, 11 victorias y 44 podios. Números que asustan, pero no logró lo que todo piloto anhela: consagrarse campeón. "La Fórmula 1 es difícil, no podemos ganar todos los campeonatos. Además, Ferrari siempre fue un poco especial. Casi ganan el año pasado. Estuvieron muy cerca, pero Red Bull Renault fue realmente muy competitivo. Por eso la gran dominación. A veces debes aceptar que hay gente que está haciendo un mejor trabajo", sentenció el francés sobre el pasado del español. 

Sobre el futuro de Alonso, Prost cree que le espera algo parecido a Vettel: "No creo que Alonso gane su tercer título en 2015. Va ser casi imposible. Le pasará lo mismo que a Vettel en Ferrari. Ambos son conductores top de la Fórmula 1, pero quizás ellos no esperan ser campeones la próxima temporada. Tendrán que construir en pro de los equipos".

Hablar con Prost sobre Fórmula 1 es rememorar una de las rivalidades más recordadas de la historia del deporte, la que tuvo con el brasileño Ayrton Senna dentro y fuera de la pista.

Se ha escrito y visto mucho sobre el tema, pero ¿fue tan grande la rivalidad como la gente piensa? "Fue muy fuerte, a veces muy ruda", reconoce el francés a Espectador.com. "Sin embargo, terminó en una gran amistad… sobre todo cuando me retiré".

Prost recuerda que el peor momento de la relación con el brasileño lo vivió en el Gran Premio de Japón de 1990, cuando Senna, que conducía un McLaren, forzó un accidente para acabar con las posibilidades del francés, piloto Ferrari en esa época, y ser campeón. 

Este año se cumplió el vigésimo aniversario de la muerte del brasileño. A pesar de las desavenencias deportivas, Prost fue uno de los que cargó con su féretro en Brasil y, hoy en día, es miembro de su fundación. Los años han puesto a cada uno en su lugar: ambos son leyendas de la Fórmula 1. "Nos teníamos un montón de respeto y lo que debemos recordar es que fue una historia fantástica".