Tuya y mía

El Marsella se acerca a su quinta final

El Marsella se acerca a su quinta final

El Olympique de Marsella dio un paso hacia la final de la Liga Europa, que sería la quinta de su historia en una competición continental, al derrotar en la ida en su estadio (2-0) al Salzburgo, condenado a la remontada en Austria.

Los marselleses aprovecharon el impulso favorable que rodea al club desde su fastuosa victoria por 5-2 ante el Leipzig en la vuelta de los cuartos de final y, arropados por un público ensordecedor, doblegaron a sus rivales.

El equipo francés busca su primera final desde 2007, que se jugará en su país, en Lyon.

El fogoso Florian Thauvin logró a los 16 minutos lo que el Marsella no había conseguido en los dos duelos anteriores en la fase de grupos contra el Salzburgo, abrir la lata de su defensa, una ventaja confirmada a la hora de juego con un tanto de Clinton cuatro minutos después de haber entrado en el campo.

Fue la apoteosis de un equipo que ha recobrado la fe de la mano del multimillonario estadounidense Frank McCourt, que se mostraba exultante en el palco saludando a su director deportivo, el español Andoni Zubizarreta.

El Salzburgo, que eliminó al Borussia Dortumund y al Lazio, deberá aferrarse a su condición de revelación para remontar en las faldas de los Alpes el resultado sufrido a orillas del Mediterráneo.

Su papel no desmereció y no evidenció la inexperiencia que podría suponerse de su joven plantel, que solo sucumbió ante el empuje de un equipo que muestra ante su público un brío desconocido.

El Velódromo se ha convertido en un fortín en el que, en competición europea, el Marsella no pierde desde que en febrero de 2016 el Athletic de Bilbao se impuso con un soberbio tanto de Aritz Aduriz en dieciseisavos de final de esta misma competición.

Mucho tiempo ha pasado desde entonces y el Olympique luce ahora otro rostro, un cambio que ha detectado el público de la ciudad francesa con más sabor futbolero, que ha recuperado la fe en su equipo que perdió tras la salida del técnico argentino Marcelo Bielsa en 2015.

La comunión con el público del equipo que entrena Rudi Garcia se notó en el césped, donde reinó el pie derecho de Dominique Payet, capaz de buscar huecos en una zaga austríaca reputada por su firmeza.

Encontró uno en el minuto 16, cuando sirvió una falta desde la derecha a la espalda de la defensa, donde Thauvin, con un remate poco ortodoxo y quizá ayudado con una mano, cabeceó a la red.

El tanto obligó al Salzburgo a adelantar sus líneas y el partido se equilibró.

Aunque hasta los primeros minutos de la segunda mitad no logró llevar el miedo a las gradas. Primero en el 53 con una internada de Lainer, que reclamó penal de Maxime Lopez, y, un minuto más tarde, Wolf lo intentó desde la frontal del área y obligó a Pelé a estirarse para evitar el empate.

Le faltó intensidad y colmillo al equipo del joven técnico alemán Marco Rose, que vio cómo en el minuto 64 la eliminatoria se le complicaba cuando, nada más ingresar en el campo en sustitución de Lopez, el camerunés Clinton Njie, de nuevo servido por Payet, logró el segundo tanto.

No se arredró el Salzburgo, que pudo acortar distancias 10 minutos más tarde en una combinación entre Ulmer y Gulbrandsen que el atacante noruego culminó con un remate a un poste de la portería de Pelé.

El portero francés, poco después, tuvo que emplearse a fondo en un par de ocasiones austríacas para mantener una ventaja de oro y el Salzburgo reclamó otro penal en el tiempo añadido.

FICHA TÉCNICA - 

2 - Olympique de Marsella: Pelé; B. Sarr, Rami, Luiz Gustavo, Amavi; Lopez (Clinton, m.60), Sanson; Thauvin (Germain, m.81), Payet, Ocampos (Zambo, m.52); Mitroglou

0 - Salzburgo: Walke; Lainer, Caleta-Car, Ramalho, Ulmer; Haidara (Yabo, m.81), Samassékou, Wolf (Schlager, m.68), Berisha; Dabbur, Hwang (Gulbrandsen, m.60)

Goles: 1-0, m.16: Thauvin; 2-0, m.64: Clinton

Árbitro: William Collum (ECO), amonestó a los locales Lopez y Mitroglou, y al visitante Wolf.

Incidencias: Encuentro de ida de las semifinales de la Liga Europa disputado en el estadio Velódromo de Marsella ante unos 60.000 espectadores. Se guardó un minuto de silencio por el reciente fallecimiento del exjugador internacional francés Henri Michel. 

EFE