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Crónica del partido

Tras unos minutos de paridad, donde Uruguay encontró en el rompimiento de Bessio y el tiro de media distancia de Ubal sus principales armas, y defendió colapsando permanentemente la pintura Brasil encontró a Felipe Motta muy encendido para anotar 13 puntos -incluyendo tres triples- e irse al primer descanso ganando 18-13.

Motta siguió anotando, a pesar que la celeste lo persiguió en los picks e intentó negarle la recepción con Lautaro Pérez yendo sobre él. Brasil trabajo bien las ayudas para controlar los rompimientos de Bessio y abrió 17 de renta con Leoni atacando el aro. Luego de casi ocho minutos sin anotar Uruguay encontró en los rompimientos de Rodriguez y Previatti -con derecho a hundida- la reacción, pero nuevamente apareció Motta con bandeja y luego triple para que la verdeamarela se vaya al entretiempo ganando 36-21.

Atacando el aro y transformando faltas en libres la celeste se arrimó, con gran pasaje de Agustín Ubal y una sólida defensa luego de la presión extendida para ponerse a seis. Dos triples de Rodolfo Bolis devolvieron el control a los brasileños, pero Joaquín Rodríguez encontró rompimientos para mantener a Uruguay cerca. Nuevamente en el momento que Brasil más lo precisaba aprecio Felipe Motta, con libres y un bombazo para dejar el score 50-41 en su favor.

Los norteños tuvieron un inicio inmejorable, con triples de Motta y Bolis para sacar 14 al minuto del último cuarto. Rodriguez apareció con triples providenciales para la celeste, y el reingreso de Pérez le volvió a dar mucha presión al balón a Uruguay. Leoni y Motta generaron para Brasil, mientras Agustín Ubal fue el responsable de anotar desde su uno por uno en la ofensiva uruguaya, visitando la línea seguido. Un triple de Rodríguez nos puso a cuatro restando 40 segundos, pero Bolis respondió con la misma moneda y liquidó en encuentro. Triunfo de Brasil 65-57, para quedarse con el título de campeón.

EL PODIO

La actitud de todo el equipo, que cuando parecía que el juego se iba en la primera mitad no bajaron la cabeza, redoblaron la actitud, la defensa y la agresividad para atacar el aro y remontaron el partido. Ganando o perdiendo, la forma importa y la de estos pibes siempre fue la misma. Enorme corazón.

Agustín Ubal merece comentario aparte. Cuando se puede jugar lindo, destaca por su elegancia. Pero hoy, cuando el partido estaba áspero se remangó, atacó el aro con su técnica pero también mucha fuerza para anotar y recibir faltas. Proyectazo.

Joaquín Rodríguez es otro que merece destaque en este juego. No arrancó fino con el tiro, pero levantó la cabeza y buscó otras formas de colaborar con el equipo. Atacó el aro, asumió la defensa del mejor jugador rival y en el último cuarto sí le entraron triples que dieron esperanza a la celeste.

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Estadística Oficial