La celeste llegó antes que la selección australiana y ya hizo una primera práctica de fútbol. Luego, a dormir, y el martes, a probar la cancha.

Uruguay llegó y entrenó en Sidney

La celeste llegó antes que la selección australiana y ya hizo una primera práctica de fútbol. Luego, a dormir, y el martes, a probar la cancha.

En la primer jornada en Sidney, el cuerpo técnico celeste intentó que los futbolistas no durmieran, para tuvieran una noche larga de descanso.

Luego de su llegada a la capital australiana, la selección hizo su primer entrenamiento. El movimiento duró una hora y comenzó con una charla técnica de 15 minutos. Tras esa charla el grupo se dividió en tres.

Los que jugaron realizaron ejercicios regenerativos con el profesor Valenzuela, los tres arqueros realizaron trabajos específicos y el resto realizó un trabajo con pelota en espacios reducidos. En el entrenamiento se utilizó la misma pelota con la que se jugará el partido.

Mañana, antes del mediodía se realizará un entrenamiento táctico donde ensayará el equipo titular y por la tarde noche, el plantel realizará el reconocimiento del Telstra Stadium donde se jugará el partido.

A pesar de todos los cambios que se realizaron en la forma en que Uruguay viajaría a Australia, la delegación celeste parece haber llegado a Sidney antes que los australianos. Incluso, algunos jugadores viajaron en clase ejecutiva.

Cambios en el equipo. Al finalizar el entrenamiento de este lunes (martes australiano), Jorge Fossati habló con la prensa pero no dio datos sobre la formación para el partido del miércoles.

Seguramente, Diego Lugano ingrese al equipo, ante la baja de Diego López, y la media cancha será reforzada con la entrada (casi segura) de Gustavo Varela.

Es posible que Mario Regueiro ingrese al equipo y también, que Darío Silva sea titular.

Diego Forlán fue el único del plantel que no viajó, ya que hará su recuperación en Buenos Aires con un kinesiólogo de River Plate.

Goles dobles. El reglamento de los repechajes establece que si Uruguay hace un gol, Australia deberá convertir tres para ir al Mundial. Esto se debe a que en caso de igualdad de puntos y goles, los tantos que hayan sido convertidos como visitantes valdrán dobles, para dirimir la disputa.

Asimismo, en caso de que al finalizar los dos partidos las selecciones terminen empatadas en puntos y saldo de goles, habrá un alargue (dos tiempos de 30 minutos). Para ello, el único resultado posible es que Australia gane 1 a 0. En el caso de que haya tiempo suplementario y también termine en empate, según la FIFA, los goles de visitante valdrán doble, por lo que Uruguay clasificaría si se diera esa instancia.

Las chances celestes, entonces, son las siguientes: ganar por cualquier resultado, perder sólo por un gol de diferencia o empatar en el alargue.