Lo había hecho por segunda vez y con distinta integración ya que, ahora, está presidido por José Luis Corbo y antes por Miguel Navajas.

En la primera oportunidad el Tribunal de Penas había opuesto argumento formales.

Luego el Colegio superó esas observaciones y, tras instruir un voluminoso expediente eliminó a Gustavo Méndez.

Ahora el Tribunal de Apelaciones apoyó el planteo del juez pero todavía no se conoce  la nueva argumentación del Tribunal.

Ante eso, el Colegio de Árbitros presentó renuncia aún antes de conocer el texto de la resolución del Tribunal.

De todas formas sus miembros, donde primaban los miembros técnicos que venían desarrollando un muy buen trabajo, renunciaron en bloque.

Con la decisión, el árbitro quedaría nuevamente habilitado como juez de Primera Categoría porque perdió la categoría internacional.

De todas formas, versiones provenientes del entorno de Méndez señalan que el árbitro no tiene como prioridad la de seguiría trabajando en Uruguay a pesar de quedar habilitado.

Su principal interés es quedar con su ficha lo menos cargada posible como para poder aspirar a dirigir en el exterior.