(Emitido a las 8:20)

JOSE IRAZABAL (JI):
Los precios del petróleo mostraron fuertes subas en las últimas semanas en los mercados internacionales y hace pocos días se llegó a establecer un nuevo récord al superarse los 100 dólares el barril.

¿Por qué están subiendo tanto los precios del petróleo? ¿Qué puede pasar en los próximos meses? ¿Cómo afecta esta escalada del petróleo a la economía uruguaya?

El diálogo es con la economista Sandra Pérez Ramos de la consultora Deloitte.

Comencemos haciendo un breve resumen de los principales números que se dieron el año pasado para tomar como referencia. ¿Cuánto fue el aumento que tuvo el petróleo en 2007?

SANDRA PEREZ RAMOS (SPR):
A lo largo de todo el año pasado vivimos una suba sostenida de los precios del petróleo. De esa manera llegamos al cierre de 2007 con una cotización del crudo West Texas de 96 dólares por barril.

Si tenemos presente que cuando empezó 2007 el precio del petróleo de esta variedad se ubicaba en 61 dólares el barril. Eso quiere decir que en el conjunto del año pasado la suba del crudo fue de 57%.

JI: - Una suba realmente impresionante. Y en los primeros días de enero el petróleo siguió subiendo y superó por primera vez en la historia el precio de 100 dólares el barril.

SPR: - Si, es correcto. Se alcanzó un nuevo récord histórico en términos nominales, en dólares corrientes. Sin embargo, me gustaría precisar que éste no es un récord cuando se mide en términos reales. Si miramos hacia atrás en la historia y hacemos una comparación quitando el efecto que tiene la inflación, podemos observar que a principios de los 80 el precio del barril de crudo llegó a cotizar a un nivel, que medido a precios de hoy, sería algo así como 102 dólares, un poco por encima del registro que se alcanzó hace algunos días. De todos modos, estamos incluso en términos reales muy cerca de ese máximo.

JI: - Ese es un dato bien interesante. Ahora, ¿por qué subió tanto el precio del crudo en los últimos meses y por qué sigue subiendo?

SPR: - En primer lugar hay que advertir que los mercados de "commodities" en general y también los de petróleo son muy volátiles y eso dificulta encontrar explicaciones muy convincentes a los distintos movimientos. En general podemos encontrar opiniones muy diversas entre los analistas especializados.
Por un lado, hay quienes hablan de una serie de factores más coyunturales, de corto plazo, es decir elementos que presionan al alza o a la baja el precio del petróleo en momentos puntuales. Por otro lado, también hay analistas que se refieren a algunos otros factores más de tipo estructural que estarían explicando la tendencia alcista que se observa, no ya en un momento puntual, sino que se registra desde hace algunos años.

JI: - Empecemos entonces por los factores coyunturales. ¿A qué elementos te estás refiriendo?

SPR: - Me refiero fundamentalmente a los problemas que se viven actualmente en Nigeria, uno de los grandes productores de petróleo del mundo y a los recientes tensiones entre Estados Unidos e Irán, otro de los grandes productores de petróleo. Eso desde el punto de vista de la oferta.
A esto se suma también que en Estados Unidos se está viviendo un invierno muy frío, con pronósticos que no parecen cambiar mucho en las próximas semanas, lo que se presume que elevaría la demanda por petróleo. Y las reservas de crudo que tiene ese país están cayendo según los últimos datos. Hay que tener presente que Estados Unidos es el principal consumidor de petróleo del mundo.
Entonces, en un contexto en el que se espera algún problema por el lado de la oferta, junto con una mayor demanda, lógicamente los precios se disparan. Y se disparan en dólares, una moneda que sigue debilitándose.

JI: - Hablabas antes de que también había factores más estructurales que explicaban el encarecimiento del petróleo en los últimos años.

SPR: - Sí. Desde hace ya algunos años las principales hipótesis que se manejan aluden al crecimiento de la demanda de crudo de los países asiáticos; una demanda que además se conjuga con una oferta mundial de petróleo que está fuertemente concentrada en países que se ubican en zonas muy conflictivas del planeta. Se habla también de una eventual escasez futura de petróleo.
Son todos argumentos que están vigentes desde hace años y que si bien explican que los precios hayan subido, de todas formas no justifican que se hayan superado esos niveles, de 100 dólares el barril.

JI: - ¿Y qué podemos esperar para el resto del año? ¿Se espera que se revierta la suba de los días pasados?

SPR: - En realidad hay especialistas que hablan de que el precio del crudo rondará los 100 dólares durante todo el primer semestre del año. Lo cierto es que los contratos a futuro que se transan en Nueva York apuntan a un precio que rondaría los 90 dólares promedio en el conjunto de 2008 o un poco por encima de esa cifra. Y eso representaría una nueva suba respecto al promedio de 2007.

JI: - Si el precio del petróleo finalmente se ubicara en ese nivel, ¿qué consecuencias tendría para nuestro país? Pensando por ejemplo en las importaciones de petróleo que hace ANCAP, en las posibles subas de los precios de los combustibles...

SPR: - Sí, ese es justamente uno de los mayores perjuicios: el aumento de costos que sufriría ANCAP y las consecuencias que eso acarrearía. El año pasado, por ejemplo, ANCAP gastó más de 1.000 millones de dólares en compras de petróleo crudo y si el precio volviera a subir, eso afectaría sin dudas los costos de la empresa...

JI: - Lo que podría traer aparejado aumentos de los precios de los combustibles. Si miramos las subas de los últimos días, ¿podemos pensar en un aumento relativamente próximo de los combustibles?

SPR: - En primer lugar lo que se ha anunciado hasta ahora es que los precios de los combustibles se van a mantener por lo menos durante todo enero.

A fin de este mes el Directorio de ANCAP evaluará el comportamiento del mercado, comparará el precio de referencia fijado con el precio promedio del petróleo del mes anterior. Y en base a ese resultado decidirá si corresponde o no que haya una suba de los precios de los combustibles.

El precio de referencia que está vigente actualmente desde noviembre del año pasado, cuando aumentaron por última vez los combustibles, es de 93 dólares el barril, con un tipo de cambio de 22 pesos. Si bien es cierto que el petróleo superó esa pauta en los últimos días, el tipo de cambio se ubica por debajo del nivel pautado y eso da cierto margen de maniobra. Además, lo más importante será lo que ocurra en las siguientes semanas. En caso de que en el promedio del mes supere la referencia por un margen significativo, entonces sí, podría darse un aumento de combustibles en febrero.

JI: - ¿Cómo evalúan ustedes el impacto que un contexto de precios del petróleo elevados puede tener sobre la inflación?

SPR: - Yo diría que es un riesgo que está bien presente. Los combustibles tienen un peso muy relevante en la canasta de consumo del IPC, por lo cual subas muy significativas de estos precios necesariamente implican presiones adicionales a la inflación.

Sin embargo, por otro lado también debemos recordar que en 2007 el gobierno hizo un esfuerzo fiscal para evitar algunos aumentos de combustibles que se hubieran efectuado si sólo se hubiera tomado en cuenta la comparación entre el precio de referencia de ANCAP y el de mercado. Quizás este año pueda suceder algo así de nuevo.

En todo caso, lo que debería quedar claro es que sigue estando muy vigente el riesgo de que este año suframos un nuevo shock negativo externo por parte del petróleo y eso puede terminar generar nuevos desafíos para la política económica.