(Emitido a las 08.25)

EMILIANO COTELO (EC):
La economía uruguaya registró un crecimiento muy fuerte el año pasado y eso se reflejó en los resultados del comercio exterior.

La semana pasada se conocieron los datos de cierre de año de las importaciones uruguayas, que marcaron una fuerte suba en 2007. Las exportaciones, por otro lado, también tuvieron un aumento importante el año pasado, en un contexto que fue muy bueno a nivel internacional. Sin embargo, en las últimas semanas el panorama externo no luce prometedor. Las perspectivas se están deteriorando y eso seguramente tendrá algún impacto en nuestra economía.

Qué pasó el año pasado en materia de balanza comercial? ¿Qué rubros crecieron más y por qué? ¿Cómo nos afectará este año el nuevo escenario internacional?

El diálogo es con la economista Sandra Pérez Ramos, de la consultora Deloitte.

Comencemos hablando de las importaciones...

SANDRA PEREZ RAMOS (SPR):
Las importaciones de bienes cerraron 2007 en 5.588 millones de dólares. Eso representa unos 814 millones de dólares más que lo que se había importado en 2006, lo que significa una tasa de crecimiento de 17% y constituye también un nuevo récord histórico para nuestro país.

EC: - ¿Y cómo le fue el año pasado a los distintos rubros comerciales? ¿Qué tan generalizado fue ese aumento?

SPR: - Si miramos a nivel de destinos económicos, el crecimiento de las importaciones fue bastante generalizado, lo cual es razonable en un contexto de dinamismo tan fuerte como el que vivimos el año pasado. Recordemos que la economía uruguaya habría cerrado 2007 con una suba mayor al 7%. En un escenario donde la demanda interna muestra una gran expansión, es lógico que se verifiquen aumentos de la gran mayoría de los rubros comerciales. El año pasado las importaciones de bienes de consumo crecieron 24%, las importaciones de bienes de capital aumentaron 36% y las de bienes intermedios o materias primas subieron 12%.

EC: - Hace algún tiempo, hablamos de las importaciones de bienes de consumo como un indicador que reflejaba el escaso efecto que parece haber tenido la implementación de la reforma tributaria sobre el gasto de los hogares. Ahora que tenemos cifras de cierre de 2007, ¿sigue vigente esa conclusión?

SPR: - Sí, lejos de disminuir las importaciones de bienes de consumo se aceleraron en el segundo semestre del año pasado. Concretamente, en ese semestre crecieron 31% en relación al mismo período del año anterior, cuando en el primer semestre del año habían registrado un aumento interanual de 17%. Recordemos que antes de que se implementara la reforma tributaria, una de las mayores fuentes de incertidumbre estaba asociada al posible efecto negativo de la reforma sobre el consumo. Por eso estos números de importaciones son tan relevantes.

Pero aún hay más... Si analizamos estas importaciones con un grado de detalle mayor, lo que se observa es que algunos de los rubros que más se aceleraron en julio-setiembre son justamente los que -en principio- se podían visualizar como más vulnerables. Hablo por ejemplo de los electrodomésticos, de los automóviles... Es decir, rubros cuyo consumo está más orientado a los hogares que tienen mayor poder adquisitivo y que son los que sufrieron el mayor impacto de la reforma en sus ingresos.

Lógicamente, el descenso del tipo de cambio y la suba de los salarios en dólares seguramente ha jugado un papel clave en esas subas. Pero a nuestro juicio, es razonable concluir que la reforma tributaria no afectó negativamente el consumo.

EC: - Decías antes que las importaciones más ligadas a la inversión, las de bienes de capital y de materias primas también crecieron mucho el año pasado. ¿Cuánto afectó el petróleo en ese resultado?

SPR: - La suma de las importaciones de bienes de capital y de bienes intermedios alcanzó casi a 4.400 millones de dólares, lo que da una suba de 15%. Ahora, en estas cifras están incluidas las importaciones de petróleo y destilados, que el año pasado prácticamente no aumentaron en relación al año anterior, en parte porque la refinería de ANCAP estuvo cerrada durante casi dos meses y las importaciones de energía eléctrica, que en 2007 cayeron 61%. Si excluimos a esos dos rubros, el resto de las importaciones de bienes de capital y de materias primas crecieron en realidad más de 40% en 2007.

EC: - Pasemos ahora a las exportaciones. ¿En cuánto cerraron el año pasado?

SPR: - Con respecto a las exportaciones, una primera aclaración que hay que hacer es que en este momento sólo disponemos de datos preliminares: corresponden a exportaciones efectivamente realizadas hasta noviembre del año pasado y a solicitudes de exportación de diciembre. Por eso, es probable cuando se publiquen los datos definitivos haya alguna corrección, aunque debería ser marginal.

Hecha esa precisión, según esos datos, las exportaciones superaron los 4.500 millones de dólares en 2007, lo que representa una suba de alrededor de 14% en relación al año anterior. Al igual que lo que ocurrió en el caso de las importaciones, las exportaciones también batieron un récord el año pasado... Y eso, incluso a pesar de que las ventas de carne cayeron.

EC: - ¿De cuánto fue esa caída?

SPR: - De alrededor de 13%. La faena cayó porque los productores recompusieron los stocks de ganado, eso redujo la producción de los frigoríficos y como consecuencia cayeron las exportaciones de carne. Si excluimos a la carne, el resto de las exportaciones aumentó más de 20% el año pasado.

EC: - ¿Qué otras tendencias vale la pena destacar con respecto a las exportaciones?

SPR: - El crecimiento de las exportaciones fue generalizado pero destacaría el aumento que tuvieron las exportaciones de cereales, de más de 60% en dólares y las de lácteos, del orden de 30%. Son productos que están aumentando en volumen, pero que también aumentan sus precios.

En el caso de las exportaciones los precios tuvieron una incidencia importante en que se lograran registros récords. En varios rubros agropecuarios se observaron aumentos muy fuertes de los precios, en línea con los internacionales. Por ejemplo, los precios del arroz subieron más de 20%, los precios del cuero aumentaron 19%, la cebada 15%... todos aumentos muy importantes.

EC: - ¿En cuánto queda entonces el saldo de la balanza comercial de 2007? Es un déficit de más de 1.000 millones de dólares...

SPR: - Seguramente sí. Con los datos que manejábamos antes, el déficit comercial de todo el año pasado alcanza a 1.063 millones de dólares, algo más de 200 millones de dólares por encima del déficit del año anterior. En realidad es el mayor déficit desde 2000.
De todas maneras con el dinamismo que mostró la economía el año pasado era razonable esperar un aumento del déficit comercial. Cuando una economía entra en una senda de reactivación, como pasó luego de la crisis del 2002, al principio se produce un fuerte aumento de las exportaciones. El impulso proviene del sector externo. Pero después, a medida que la economía crece, aumenta el gasto interno, se comienza a demandar más bienes, más servicios y parte de esa mayor demanda se cubre con más importaciones. Eso fue lo que ocurrió el año pasado: las importaciones crecieron a un ritmo mayor al de las exportaciones y eso deterioró el saldo de la balanza comercial.

Por otra parte, si bien es cierto que el déficit luce elevado, hay que contemplar que el comercio exterior es mucho más importante ahora. En 2000 el país exportaba unos 2.300 millones de dólares, frente a los 4.500 millones de 2007.

EC: - Hablemos ahora de las perspectivas. Decías antes, Sandra, que un elemento importante en el hecho de que se alcanzaran récords de exportaciones en dólares en 2007 había sido la suba de los precios externos. Pero en las últimas semanas el marco internacional se está deteriorando en forma acelerada. Hace pocos días entrevistamos al economista Arturo Porzecanski, que nos decía que a su juicio los precios de los "commodities" caerían este año. ¿Cómo afectará un escenario así a Uruguay?

SPR: - Es cierto que la crisis internacional es un factor de preocupación para Uruguay. El dinamismo de las exportaciones de materias primas del país está en alguna medida bajo cierto riesgo. Pero por ahora los precios de los "commodities" no se han debilitado mucho. Cayeron un poco a principios de la semana pasada, pero repuntaron después, al igual que lo hicieron las bolsas.

Y por último, también hay que tener en cuenta que los precios de los "commodities" están en niveles muy elevados. Entonces, la clave estará en las magnitudes que tengan los eventuales descensos. Los niveles actuales de los "commodities" son tan altos en relación a los que había tan sólo un año atrás que si no se produce un descenso marcado y rápido, al menos en 2008 podríamos tener todavía muy buenos precios de exportación. Por supuesto que en las próximas semanas tendremos que seguir de cerca la evolución del contexto internacional y por supuesto, la marcha de estos precios.

-------------------------------