Análisis Económico

Evolución reciente y perspectivas para el sistema bancario

Análisis económico de Alfonso Lema, de la consultora Deloitte

(Emitido a las 8.36)

JOSÉ IRAZÁBAL:

La semana pasada el Banco Central divulgó nueva información acerca del desempeño del sistema bancario.

¿Cuánto ha crecido el crédito en lo que va del año? ¿A qué sectores de la actividad económica se está dirigiendo? ¿Qué está sucediendo, en particular, con el crédito hipotecario? ¿Cómo se afectarán esas tendencias por la suba de encajes que entró a regir este mes? En concreto, ¿se frenará la suba del crédito? Y por último, ¿qué está sucediendo con los depósitos? ¿Estamos viendo un aumento significativo, del cual debamos preocuparnos, de los depósitos de argentinos en nuestro sistema financiero? Estas son algunas de las preguntas para el diálogo, en instantes, con el contador Alfonso Lema, socio de la consultora Deloitte.

Empecemos por el crédito. ¿Podemos dar algunas cifras de cómo fue la evolución en esta primera parte del año? 

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ALFONSO LEMA:

Las cifras del Banco Central, que consideran todos los bancos privados, más el BROU y el Banco Hipotecario, están marcando que el crédito bancario subió más de 450 millones de dólares en lo que va del año. Eso nos deja con un saldo de créditos brutos a las empresas y a las familias de casi 6.500 millones de dólares al cierre de mayo, lo que a su vez supone un 40% más de crédito que hace un año atrás.

JI - 40% de crecimiento en un año. ¿Cómo evalúan ustedes este aumento tan fuerte?

AL - Al comienzo del año, cuando en este espacio hicimos un balance del desempeño del sistema bancario en 2007 y conversamos sobre las perspectivas del crédito, habíamos dicho que probablemente este año fuésemos a ver un crecimiento importante del volumen de crédito. Decíamos eso por dos razones. En primer lugar, porque en la medida en que la actividad económica sigue creciendo a un ritmo tan fuerte como el que estamos viendo en Uruguay, las empresas facturan más y se plantean nuevas inversiones; al mismo tiempo, las familias tienen mayores ingresos y eso les permite tomar más crédito. Pero a estos elementos, que podríamos llamar de demanda de crédito, se suma otro elemento importante, que es la necesidad de los bancos de prestar más.

JI - ¿Qué quiere decir eso?

AL - Hasta el año pasado, los bancos captaban depósitos a tasas bajas, prestaban parte de esos fondos en el mercado local y colocaban los excedentes en los mercados internacionales. Pero en los últimos meses el contexto internacional cambió mucho, las tasas de interés cayeron de la mano de la rebaja de tasas por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos y eso hizo muy poco rentables las colocaciones en el exterior. Si a esto sumamos que los costos de los bancos medidos en dólares subieron por efecto de la caída del tipo de cambio en Uruguay, es bastante fácil de comprender que los bancos enfrentan una presión fuerte por encontrar alternativas de colocación con un rendimiento más atractivo. Y en ese sentido, una de las alternativas es destinar una mayor proporción de sus activos a conceder préstamos al sector privado porque las tasas que los bancos cobran por los créditos en el mercado local son relativamente más altas que las tasas que obtienen en los mercados internacionales.

JI - ¿Hay información de hacia qué sectores se direccionaron esos mayores volúmenes de crédito?

AL - La información es parcial. No tenemos información de stock de créditos por sector, pero podemos saber a dónde fueron los nuevos créditos que se fueron concediendo. La información es parcial porque al mismo tiempo hay créditos que van venciendo y como sobre eso no hay información por sector, no podemos saber con precisión cuáles son los sectores que ganan y cuáles son los que pierden en términos netos. 

De todas maneras y hecha esa precisión, de la información de nuevos créditos concedidos, podemos sacar algunas conclusiones interesantes, sobre todo en lo que hace al crédito a las familias.

La información de nuevos créditos que publica el Banco Central muestra que hasta mayo se otorgó el equivalente a unos 280 millones de dólares en crédito a las familias. La gran mayoría corresponde a crédito para el consumo, pero también se observó un aumento fuerte del crédito hipotecario. Esta es una apuesta de los bancos privados que en realidad comenzamos a ver el año pasado, pero que se mantiene firme también este año.

JI - ¿De qué magnitudes estamos hablando?

AL - Son créditos que se dan básicamente en unidades indexadas, así que quizás es mejor manejar los montos en pesos. En los primeros cinco meses del año se concedieron nuevos créditos para vivienda por el equivalente a 655 millones de pesos (unos 33 millones de dólares). Eso nos deja un promedio de unos 130 millones de pesos por mes, que es más de un 40% superior de los montos que vimos el año pasado. En realidad esta información comenzó a estar disponible desde mayo del año pasado, pero entre mayo y diciembre el promedio concedido por mes estuvo en unos 90 millones de pesos.

Mirando para adelante, esta es una tendencia que probablemente va a seguir manteniéndose. Recordemos que ahora el Banco República comenzó a dar créditos para viviendas, y también se anunció que el Banco Hipotecario va a volver a prestar sobre fin de año.

JI - Justamente iba a preguntar sobre las perspectivas, ya no del crédito hipotecario sino del crédito en general. La información que comentamos hasta ahora llega hasta mayo, pero a partir de junio comenzó a regir un nuevo régimen de encajes. ¿Qué efectos tendrá esa medida sobre el crédito?, ¿los bancos van a poder seguir prestando a este ritmo?

AL - Justamente uno de los objetivos de subir los encajes es moderar el crédito bancario, para que de ese modo se suavice un poco el crecimiento de la demanda interna y no sigan incrementándose las presiones inflacionarias.

Con el nuevo régimen los bancos deben inmovilizar una parte mayor de los fondos que captan. Los encajes para los depósitos en pesos a menos de 30 días pasaron de 17% a 25% y los encajes de los depósitos en moneda extranjera para plazos de hasta 180 días subieron de 25% a 35%.

JI - ¿Y eso qué significa?, ¿que los bancos van a poder prestar menos?

AL - No es una restricción tan operativa. En realidad eso no va a impedir que los bancos presten porque los bancos cuentan con fondos en exceso que van a poder seguir dedicando al crédito, pero seguramente el crédito se va a hacer más caro.

Los bancos deben inmovilizar una parte mayor de sus fondos y además el Banco Central no remunera los encajes. Eso significa que los costos de los fondos prestables suben. Frente a esa situación, los bancos tienden a aumentar las tasas que cobran por los créditos, de forma de compensar ese mayor costo. De hecho eso es algo que estamos viendo en las últimas semanas. Varios bancos han subido las tasas activas, que son las tasas que cobran por los créditos. El efecto del encarecimiento del crédito no es inmediato, pero en el mediano plazo podríamos esperar que eso impacte en la demanda de crédito y eventualmente sí veamos una moderación en el ritmo de crecimiento de los préstamos.

JI - Hasta ahora hemos hablado de los créditos. Para terminar te pregunto sobre los depósitos. A la luz del deterioro del clima de expectativas en Argentina todos nos preguntamos qué tan fuerte puede ser la afluencia de depósitos de argentinos hacia nuestro país. ¿Qué dicen los datos del Banco Central al respecto?

AL - Es cierto que desde el comienzo del año hemos visto un aumento de los depósitos de no residentes que no se condice con la tendencia que habíamos visto en los últimos años. Desde el final de la crisis la recuperación estuvo liderada por los depósitos de residentes. Desde diciembre del año pasado a esta parte, sin embargo, el crecimiento de los depósitos de no residentes ha superado al ritmo de crecimiento de los depósitos de residentes. En los doce meses a mayo, por ejemplo, los depósitos de residentes en los bancos privados crecieron 17%, mientras que los depósitos de no residentes crecieron 27%.

De todas maneras, este crecimiento no es algo que deba alarmarnos. Primero porque el marco de supervisión y regulación del sistema financiero ha cambiado mucho del 2001 hasta ahora (se ha fortalecido y las instituciones son más sólidas), pero además porque estamos hablando de volúmenes muy menores. Aún con la suba de los últimos meses los depósitos de no residentes son sólo un 30% de los depósitos totales en moneda extranjera, cuando en 2001 eran más de la mitad de los depósitos de los bancos privados.