El tipo de cambio aumenta en medio de un contexto externo muy volátil, con baja de los commodities y una revalorización del dólar ante varias divisas
Análisis del economista Pablo Rosselli, de la consultora Deloitte.
(Emitido a las 8.39)
En estos últimos días se observó una suba sensible del dólar en nuestro país, que ocurrió en medio de un contexto externo muy volátil donde se ha destacado la baja de precios de los commodities y por otro lado una revalorización del dólar frente a distintas monedas.
¿Cómo hay que interpretar estas tendencias? ¿Qué es lo que está pasando en la economía mundial? ¿Qué consecuencias podremos tener acá sobre nuestro país? ¿Veremos nuevas subas del dólar? ¿Qué sucedería en ese caso con la inflación? Y las expectativas de crecimiento ¿se pueden ver modificadas?
Vamos a charlarlo con el economista Pablo Rosselli de la Consultora Deloitte.
***
EC ¿Cómo están viendo ustedes esta volatilidad de los mercados internacionales? ¿Estamos ante un cambio importante del contexto externo, que hasta hace poco venía siendo tan favorable para nosotros?
PABLO ROSSELLI:
Es notorio que hay una volatilidad muy importante en los mercados internacionales y con esa volatilidad siempre es difícil hacer interpretaciones o proyecciones certeras.
Corriendo el riesgo igual de aventurar una respuesta apresurada por esa volatilidad, a nuestro juicio estamos asistiendo a un cambio significativo del contexto externo, a un deterioro desde la perspectiva de Uruguay del contexto externo que probablemente nos va a llevar a revisar en alguna medida las proyecciones para los próximos 18 meses. Decimos esto porque en realidad hay una conjunción de indicadores que están apuntando a un cambio de contexto.
Desde hace varios meses tenemos que las bolsas en los principales mercados del mundo están cotizando a la baja y eso ya es una señal de que los inversores esperan menos ganancias, seguramente derivadas de un menor crecimiento de la economía mundial. Estamos viendo caídas de varios commodities y en las últimas semanas vemos una revalorización importante del dólar frente a muchas monedas.
EC ¿Podemos ver algunas cifras? Bajamos esto a tierra y lo vemos en números.
PR Me concentro en commodities y en la revalorización del dólar, que de alguna forma es más reciente que la caída de las bolsas, que con variantes ha comenzado a principios de este año. Pero además el petróleo está levemente por debajo de los 103 dólares el barril y estuvo a 145 dólares en julio; fue un pico, pero en solo dos meses en el mercado el precio del petróleo cambió mucho. Lo mismo está ocurriendo con varios precios de exportación de nuestro país, con precios de materias primas agropecuarias, y uno de los casos más emblemáticos es el de la soja, que en julio estaba a 600 dólares la tonelada y hoy está por debajo de los 430 dólares la tonelada.
El otro elemento al que me refería es la revalorización del dólar; el euro cotizaba ayer apenas por debajo de 1.40 dólares por cada euro, cuando dos meses atrás estaba a 1.58. Esto quiere decir que en Europa hemos visto en dos meses una devaluación del orden del 13%. Si vamos a Australia, que es un país relevante, un exportador de materias primas (como Uruguay), hemos visto en el mismo período una devaluación del orden del 20%; en Nueva Zelanda una devaluación del orden del 15%; en Gran Bretaña del orden del 14%. Si vamos a Brasil, ayer el dólar estaba a 1.785, hoy está cotizando 1.799 es decir a 1.80, y en julio estaba a 1.55, lo que quiere decir que en Brasil hemos visto también una devaluación del orden del 15%.
EC ¿Y por qué está sucediendo todo esto, cuál es la interpretación de ustedes?
PR Recordemos lo que veníamos diciendo desde hace un año o algo más: los analistas y los mercados mostraban preocupación por el desempeño que iba a tener la economía de Estados Unidos en el marco de esa crisis financiera que ha tenido varias etapas.
Un año atrás había una confianza bastante importante entre los analistas en lo que se llamaba la hipótesis del desacople de las economías emergentes y había confianza en que el menor dinamismo de Estados Unidos no iba a tener esta vez un impacto tan fuerte en la economía mundial, como sí lo había tenido en episodios recesivos anteriores. Nosotros decíamos que esa hipótesis de alguna forma iba a ser probada y mostrábamos cierta cautela ante esa visión, que nos parecía que podía resultar a la postre optimista.
Lo que está ocurriendo en estas semanas es que efectivamente estamos viendo que la crisis en Estados Unidos está teniendo efectos de derrame en la economía mundial. Si bien es cierto que el PBI en Estados Unidos no cayó como esperaban los analistas, la demanda interna sí está cayendo y el PBI no ha caído porque las exportaciones han subido mucho y sus importaciones han bajado.
Ahora ¿por qué se presenta este dinamismo tan favorable de las cuentas externas de Estados Unidos? Porque el dólar estaba en mínimos históricos hasta hace un par de meses y porque el resto de la economía mundial le compraba productos a Estados Unidos.
Lo que empezamos a ver en estas últimas semanas es que ese dinamismo de las exportaciones de Estados Unidos con esa debilidad del dólar que estábamos observando está frenando a otras economías. Semanas atrás hablábamos de que la producción industrial en Europa había caído en el primer semestre entorno del 1%, que el PBI en la zona del euro había caído casi 1% en el segundo trimestre del año, con caídas más fuertes en Alemania y Francia que son los motores de la zona del euro.
Y hay algunos efectos de derrame en otras economías, por ejemplo en el primer trimestre del año el PBI en Nueva Zelanda mostró un descenso y los analistas esperan un descenso también para el segundo trimestre del año. En definitiva, ese dólar tan débil que habíamos visto hasta hace una semana empezó junto con una caída de las importaciones en Estados Unidos a frenar al resto de la economía mundial y eso es lo que está detrás de este cambio en los mercados.
Los mercados están incorporando que la economía mundial se va a frenar más de lo que estaba previsto meses atrás.
EC Venimos ahora a nuestro país. ¿Cómo analizan ustedes la suba que está dándose en el tipo de cambio? ¿Estamos ante una nueva tendencia del dólar?
PR La respuesta corta es que probablemente sí. El dólar subió 1% ayer, 2% en una semana, 4% en relación al mínimo que habíamos visto el 14 de agosto.
¿Por qué está subiendo el dólar en Uruguay? A nuestro juicio está recogiendo el impacto de esa tendencia mundial de revalorización del dólar. Por ahora la velocidad de recuperación del dólar en nuestro país es lenta, francamente bastante menor que la que hemos visto en otros mercados.
Pero si miramos para adelante, a nuestro juicio aquí hay dos claves: es probable que a nivel mundial continúe la revalorización del dólar, o por lo menos nos sorprendería más verlo retrocediendo a los mínimos históricos de hace dos meses, que viéndolo ganar terreno. En todo caso nos parece que la mayor incertidumbre es a qué ritmo vamos a ver esa recuperación, ahí hay factores bastante inciertos, porque la economía de Estados Unidos tampoco está teniendo un buen desempeño y no es fácil pensar en una suba muy fuerte del dólar de aquí en adelante. Pero nos parece que la tendencia a nivel mundial es de revalorización del dólar.
El otro elemento es que hemos visto caída de varios precios de productos agropecuarios, eso probablemente se va a ir traduciendo en descenso de precios de exportación en Uruguay, que todavía son muy altos, pero pensamos que la tendencia probablemente sea a la baja. Esos dos factores van a estar jugando a favor de que el tipo de cambio, que venía con una trayectoria marcadamente declinante desde hace varios años, revierta esa tendencia y tienda a subir probablemente en forma bastante moderada en Uruguay.
EC ¿Qué consecuencias podría tener esa nueva tendencia del tipo de cambio en Uruguay en materia de inflación?
PR Varias veces dijimos que en Uruguay veníamos con un nivel de inflación alta y así nos encuentra este shock externo, por dos factores: una demanda interna muy vigorosa y altos precios de los alimentos en el mundo. Este segundo elemento probablemente va a empezar a jugar en sentido contrario, los precios de los alimentos están bajando y eso debería ayudar a una moderación de las presiones inflacionarias, pero en sentido opuesto va a jugar una probable tendencia al alza del tipo de cambio.
En definitiva lo que estamos viendo es que probablemente la inflación va a seguir siendo relativamente elevada y una de las incertidumbres y de los dilemas que va a tener que manejar el gobierno es en qué medida el descenso de los precios internacionales ayuda a bajar la inflación y en qué medida eventuales subas del tipo de cambio van a jugar en sentido contrario.
Por ahora pensamos que la inflación en el 2008 va a cerrar arriba del 8% y pensamos que en 2009 la inflación podrá ser algo más baja, pero va a estar entorno del límite superior de la meta y va a poner al gobierno ante ese dilema y ante esa incertidumbre sobre en qué dirección mover su política monetaria.
EC Tú decías que las perspectivas del marco externo están deteriorándose, ¿qué podría implicar esto? ¿cómo se podrían ver afectadas las perspectivas de crecimiento acá en Uruguay?
PR Estamos esperando las cifras del segundo trimestre que van a ser publicadas este viernes. En 2008 pensamos que el PBI va a subir mucho, probablemente entorno de 8%. Y estamos viendo que el panorama para 2009 y 2010 es de una desaceleración relativamente importante de la economía, por ahora estamos pensando en tasas de crecimiento del orden de 4% en promedio anual.
El panorama que estamos viendo es de deterioro del contexto externo y que eso a su vez nos encuentra con un nivel de inflación alta y ahí realmente se plantean dificultades o dilemas para la política económica.